El puerto y la ciudad de Beirut, antes y después de las explosiones

  • El puerto ha quedado inutilizado tras la explosión el martes

  • Por el puerto de Beirut entra el 85 % de los alimentos importados que consumen los libaneses

La explosión en el puerto de Beirut ha destruido gran parte de la capital libanesa. Las cifras de muertos y fallecidos crece hora tras hora mientras los servicios de emergencias apoyados por los bomberos y el Ejército buscan supervivientes entre los escombros.

Más de 300.000 viviendas próximas a las instalaciones portuarias han quedado totalmente destruidas por la onda expansivas de las explosiones. La acumulación durante años de toneladas de nitrato de amonio junto a depósitos de combustible originó una enorme onda expansiva que aniquiló todo lo que pillaba a su paso.

Las primeras cifras hablan de un tercio de la capital libanesa arrasada lo que se traduce en miles de millones de euros en las tareas de reconstrucción e la que ya empieza a implicarse la comunidad internacional.

La imágenes satelitales del antes y el después de la explosión del pasado martes muestran la magnitud e la tragedia para un país envuelto en una crisis política, sanitaria y social sin precedentes.

La onda expansiva no solo ha destruido el entorno del puerto dejando una imagen de desolación, también ha inutilizado las dársenas de atraque por el que entra el 85 por ciento de los alimentos que consume el país así como gran parte de toda la ayuda humanitaria destinada a socorrer a la población siria que sufre una guerra civil.

Las imágenes muestran el nivel de destrucción en la zona sobre la que se hallaban los silos que contenían el nitrato de amonio y el carburante. La explosión ha destruido toda la plataforma de hormigón y rocas abriendo una gran tronera que ya ha sido ocupada por las aguas del Mediterráneo.