El miedo a nuevas réplicas ha llevado a muchos ciudadanos en Italia a pasar la noche en parques y espacios públicos al aire libre. El temblor del lunes, el segundo en nueve días, ha causado 16 muertos, pero no se descarta que el número aumente ya que muchas personas siguen desaparecidas. Los equipos de rescate siguen buscando a gente entre los escombros.
El número de heridos asciende a 200.
El terremoto se produjo a 40 kilómetros al norte de Bolonia y a 60 kilómetros al este de Parma y el epicentro se ha localizado a 9,6 kilómetros de profudidad, según el USGS, pero se ha sentido desde la región Veneta a Lombardía.
Este es el segundo seísmo en nueve días. El pasado 20 de mayo se produjo otro terremoto con epicentro en la zona de Ferrara, en el centro-norte de Italia, que destruyó edificios en las ciudades de Modena, Ferrara, Mantua y Bolonia. Al menos siete personas murieron y cientos se vieron obligadas a huir de sus casas.