Una modelo iraní termina durmiendo en las calles de París tras huir de su país por posar desnuda

  • En Teherán la amenazaron con recibir 148 latigazos y cárcel

  • Por ello, viajó a Estambul, donde se encontró una sociedad muy conservadora

  • En Francia ha tenido que soportar constantes propuestas sexuales

Fue portada de varias revistas de moda en Irán. Sin embargo, Negzzia, como se llama la modelo, tuvo que terminar huyendo de su propio país porque la amenazaron con recibir 148 latigazos e ir a la cárcel por propagar “una cultura anteislámica” tras posar semidesnuda.

Fue ahí donde comenzó su auténtica odisea. Tras huir de Teherán, viajó a Estambul donde estuvo trabajando un año como modelo. Sin embargo, el conservadurismo del lugar también se impuso en este caso y decidió abandonar el lugar. Pensó entonces que la sociedad francesa, mucho más abierta de mente, sería el destino ideal para ella.

En París subsistió un mes con sus ahorros. Además, tuvo que sufrir que la gente la ayudara solo para intentar aprovecharse de ella. Tras las constantes propuestas sexuales, Negzzia se fue a vivir a la calle. Con solo una maleta y una bolsa como equipaje, la modelo ha dormido durante varias semanas en bancos o parkings.

Gracias a los 400 euros que le daba el estado francés, Negzzia pudo apuntarse a un gimnasio que ha sido su salvación. Allí encontró amigos que le ofrecen cobijo y comida desinteresadamente. También ha ayudado el eco mediático que ha tenido su historia en la prensa francesa.

Al final, su odisea ha tenido un final feliz. Incluso el ministro de Interior francés, Christophe Castaner, se pronunció sobre su caso a través de Twitter el pasado 2 de junio. “Se le propondrá el asilo. Su dossier será examinado con atención debido a su situación”. Un estatus que consiguió hace un mes. Gracias a ello, Negzzia ha podido volver a trabar como modelo.