Los buzos de la Marina tailandesa, conocidos como 'Navy Seals', han entregado a las familias las cartas escritas por los doce muchachos y su entrenador de fútbol. Su intención es mantener la esperanza para reencontrarse con ellos fuera de las cavidades peligrosas en las que se encuentran.
La emoción ha tenido una repercusión internacional, ya que los niños les transmiten su inmenso amor a sus padres. Los ánimos y la comida son dos elementos comunes en las misivas. "Papá, mamá, hermano, tío… Os echo de menos a todos. Tranquilos, estoy contento en la cueva", dice Mick, de 13 años. "Los 'Navy Seals' se están preparando para llevarnos a comer pollo frito. Os quiero», apunta otro de los menores apodado Dom.
El portero del equipo, Bew, de 14 años, le promete a su madre que la ayudará cuando salga de la cueva, que asegura será pronto. Uno de sus amigos, Nick, que no pertenece al club pero se unió a ellos para hacer la excursión, le pide a sus padres que lo lleven a un bufé cuando sean rescatados. Night, otro de los chicos, le pone humor a la situación recordándoles a sus padres: "No os olvidéis de mi fiesta de cumpleaños", pues lo tuvo que celebrar dentro.
Además, el entrenador del equipo, Ekapol Chantawong, también ha querido dirigir sus palabras a las familias de los menores. "A todas las madres y padres: los niños están bien. Tenemos a nuestro equipo cuidándolos y os prometo atenderlos lo mejor posible. Gracias por vuestro apoyo y mis disculpas ante todos vosotros". No era la primera vez que metía a los niños en cavernas, tal y como informa un medio de Chile. Sin embargo, esta vez se han encontrado con inclemencias del tiempo que han complicado su salida.
Rescate contrarreloj
Las autoridades tailandesas han dado un margen de tiempo entre tres y cuatro días para salvar a los doce chicos y su entrenador, antes que las lluvias se intensifiquen. Su rescate es sumamente arriesgado porque tienen que atravesar oscuras grutas inundadas, algunas de ellas con aberturas de menos de un metro. A contrarreloj por la falta de aire y la amenaza de la subida de las lluvias, el equipo de salvamento busca la forma más segura de sacarlos.