Roger Waters ha logrado realizar una labor especial al reunir, gracias a su jet privado, a dos niños que llevaban tiempo separados a miles de km de su madre.
Desde que el padre de los niños, combatiente en EI, raptase a los pequeños de su madre y los enviase a Siria, no habían podido reencontrarse con su madre. Según ha podido comprobar The Guardian, tras el fallecimiento del padre, los pequeños pasaron a disposición de las autoridades en una base kurda ubicada en el noreste del país árabe.
La madre de los menores, Felicia Perkins, logró reunirse con sus dos hijos, Mahmud y Ayyub, de 11 y 7 años respectivamente, y 24 horas después emprendían el vuelo rumbo Londres a bordo del avión del mismísimo Roger Waters. Dejaban atrás cinco años de reclusión, soledad y tristeza al estar sin su progenitora.
Tal y como ha publicado 'The Guardian' en su cuenta de Twitter, los pequeños junto a su madre realizaban el vuelo de forma óptima desde el país donde habían residido durante cinco años hasta su destino: Londres.
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