Hoy se cumple el tercer aniversario del Brexit. El sí a la salida de Europa fue una sorpresa que se materializó con el 52 por ciento a favor y 48 por ciento en contra. La primera consecuencia del referéndum fue la dimisión del Primer Ministro, David Cameron. El mandatario se despidió dejando al país en una situación complicada de la que todavía no ha encontrado la salida.
Desde formaciones más extremistas como el UK Independence Party de Nigel Farage prometían a la población mejoras inmediatas: control de las fronteras y de la migración y recuperación del dinero que se mandaba a Bruselas, cifras que luego se demostraron falseadas.
Las negociaciones de Theresa may con Bruselas duraron dos años y acabaron de la peor forma posible para los partidarios del Brexit. Finalmente, la salida elegida era una blanda, a medias, para evitar problemas políticos con Irlanda del norte.
En enero de 2019, la situación aún fue a peor. May presenta el plan y es rechazado, siendo una de las derrotas mas estrepitosas en la historia de los comunes.
Esto desató una serie de enfrentamientos políticos entre May, su partido y la oposición laborista. La mandataria trató de presentar el plan hasta dos veces más, pero ambas fue rechazada. Finalmente, acordó con Europa un aplazamiento de la decisión, la cual ahora está fijada para octubre.
Finalmente, May acabó dimitiendo y ahora el Partido Conservador busca un nuevo Primer Ministro que acabe por poner punto y final a esta sucesión de contratiempos que ha supuesto el Brexit. El defensor de una salida dura, Boris Johnson, se mantiene como el principal favorito.