Turquía abre sus fronteras a los refugiados sirios. Más de un millar de migrantes y refugiados se han concentrado este viernes en la frontera con Grecia después de que las autoridades turcas anunciasen que no impedirán que los civiles desplazados lleguen a Europa.
Se trata de una medida que el Gobierno de Ankara ha tomado en respuesta a la muerte de 33 soldados turcos en un ataque aéreo de las fuerzas del gobierno sirio en la región de Idlib, al noroeste de Siria.
Por su parte, el ministro griego de Defensa, Nikos Panayotópulos, ha confirmado que se han producido muchos intentos de cruzar la frontera que han sido repelidos y ha señalado que también ha habido detenciones.