La guerra en Ucrania cambia las estrategias de las elecciones legislativas estadounidenses

  • Biden ya está sintiendo un repunte de sus ratios de aprobación

  • Unos datos que si bien no arrojan cifras muy cambiantes, sí suponen un cambio de inercia de cara a las elecciones

A falta de conocer el impacto definitivo que la guerra de Ucrania tendrá en los resultados de las elecciones intermedias, el próximo mes de noviembre, lo que sí está claro es que las estrategias electorales de republicanos y demócratas se han visto alteradas. Aunque los estadounidenses no votan teniendo en cuenta la política exterior, a no ser que su tropas se juegan la vida, este conflicto es diferente porque en Estados Unidos se ve como una lucha entre los países que apuestan por la democracia y aquellos que lo hacen por un régimen autoritario.

Una nueva Guerra Fría que, a diferencia de la del siglo pasado, se está desarrollando con misiles que estallan, miles de muertos y casi 5 millones de refugiados, según cifras de ACNUR (Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados). Lo que está provocando que casi 8 de cada 10 estadounidenses estén siguiendo” un poco” de cerca la situación en Ucrania y que casi el 40% lo esté haciendo “muy de cerca, según Navigator Research, una empresa demócrata de encuestas.

Contexto

Estos resultados, que son altos para tratarse de un tema de política exterior, ya están condicionando la actitud de los dos partidos mayoritarios de cara a las próximas elecciones, que serán determinantes para ver quién se hace con el control del Congreso.

Mientras ambos reestructuran sus campañas y los mensajes de política interior de cara a la ciudadanía, el conflicto sigue su curso con la participación de Estados Unidos. Así, el consejero de Seguridad Nacional, Jake Sullivan se ha reunido recientemente con su homólogo chino Yahg Jiechi, en Roma, con el fin de mantener las lineas diplomáticas de comunicación abiertas, según dijo la Casa Blanca a través de un comunicado, aunque no especificó resultados concretos.

Al mismo tiempo, se espera con expectación la alocución virtual que Volodymir Zelensky, el presidente de Ucrania, protagonizará hoy ante el Congreso estadounidense según anunciaron por carta el pasado lunes Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes y Chuck Schumer, líder de la mayoría demócrata en el Senado. Este discurso se produce tras una llamada de Zoom que tuvo lugar, a principios de este mes, entre Zelensky y unos 300 miembros del Congreso.

Ello ha dado lugar a la aprobación de casi 13.600 millones de dólares para ayuda a Ucrania y los países limítrofes, la prohibición de compra de petróleo y otros productos rusos así como el corte de las relaciones comerciales con Putin.

Campaña demócrata

Aunque la ciudadanía está respaldando la gestión de Biden acerca de la invasión de Ucrania por parte de Rusia, las encuestas todavía sitúan al partido Demócrata por detrás de los republicanos en las intenciones de voto de las elecciones de medio término. Sin embargo, el actual presidente, en su rol de líder de la OTAN, está dedicando mucho tiempo al conflicto. Tanto ahora, tres semanas después de su inicio, como antes cuando advirtió durante semanas de los movimientos de las tropas rusas.

Y los resultados no se han hecho esperar. Biden ya está sintiendo un repunte de sus ratios de aprobación, subiendo de un 40.9 a finales del mes pasado, a un 42’9 en este momento, según los sondeos del blog especializado en encuestas FiveThirtyEight. Unos datos que si bien no arrojan cifras muy cambiantes, sí suponen un cambio de inercia en la percepción del presidente y que seguirán provocando cambios en la elección de los temas, las acciones y los discursos electorales, de aquí a noviembre.

Reacción republicana

Los conservadores también se han dejado llevar por la espiral de cambios que está suponiendo este conflicto dentro de sus estrategias electorales. De hecho, la guerra en Ucrania ha abierto un nuevo frente entre los candidatos que compiten por presentarse a las elecciones de noviembre. Algunos de ellos, siguiendo las consignas de Trump, se han mostrado muy complacientes con Putin y combativos con Zelensky.

Es el caso de Madison Cawthorn, congresista republicano por Carolina del Norte, que tras varias declaraciones en las que calificaba de “matón” a Zelensky y de “increíblemente malvado” al gobierno ucraniano, fue criticado por algunos compañeros de partido, como la candidata Michele Woodhouse, lo que abre más la brecha entre los que apuestan de forma decidida por el exmandatario Donald Trump y los que siguen un camino más independiente.

Trump entra en campaña

Sin embargo, es el propio exmandatario quien, a través de los comunicados que envía a sus seguidores, sigue marcando la estrategia republicana. Y lo hace señalando los mensajes que deben repetirse como un mantra. Sobre todo en lo relativo a la subida de precios que ha experimentado el país. “Estos no son los precios de Putin, son los de Biden” o “la debilidad de Biden es la culpable (del conflicto)” son algunos de los eslóganes más usados por los miembros del partido para desprestigiar al actual gobierno.

Una estrategia que está empezando a ser rechazada por la parte más moderada de los republicanos, que prefiere cerrar filas con las decisiones adoptadas en el Congreso y que, hasta ahora, está actuando en defensa de las tropas estadounidenses situadas en territorio de la OTAN y a favor de las sanciones a Rusia. Pero la campaña electoral no ha hecho más que empezar y no hay duda de que habrá una adaptación de los mensajes y acciones electorales en función de la evolución del conflicto.