Vincent Lambert, emblema de la lucha por la muerte digna en Francia, desconectado del soporte vital

  • Un accidente de moto le dejo hace 10 años en estado casi vegetativo

  • Su esposa y cinco hermanos pedían desconectarle

  • La justicia francesa les ha dado la razón tras una larga batalla legal

Cuando Vincent Lambert escuchaba una voz familiar, incluso por teléfono, parecía que reaccionaba emocionalmente. Cuando uno de sus hermanos le hablaba, parpadeaba y le seguía con la mirada. Los médicos aseguran que tenía percepción del dolor, emociones básicas y algún tipo de reacción al entorno. Lo que Vincent no tenía, –y aquí la clave de la polémica que ha desatado el caso en Francia, su tierra natal– es capacidad para expresarse. Ni siquiera para razonar.

Fue un accidente de moto lo que le dejó, hace 10 años, en estado casi vegetativo.

Su esposa y cinco hermanos pidieron una muerte digna

Su esposa y cinco de sus hermanos, que han defendido la desconexión en los tribunales. Esgrimen que su voluntad era la de no agonizar en este estado, pero nunca lo dejó por escrito; no hizo un testamento vital. Y así habían pasado ya más de diez años. Ni había mejorado ni había posibilidad de que lo hiciera.

Los padres y dos hermanos, contra la desconexión

Los padres y dos de sus hermanos han luchado y pleiteado para evitar que se le dejase de alimentar. Sin embargo, La decisión de desconectar a Vincent Lambert ha sido avalada por el Consejo de Estado, –última instancia administrativa en Francia–, y por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.ribunal Europeo de Derechos Humanos. Por eso, finalmente, tras la larga batalla legal los médicos del hospital de Reims han comenzado a retirarle los soportes vitales.

El suyo ha sido uno de esos casos en el filo de todas las convicciones. Médicas, jurídicas y éticas... Un auténtico dilema que ha acabado por convertirse en Francia en símbolo y emblema del movimiento por la muerte digna en el país.