Vitaly Suárez, el "ángel de la guarda" de Jersón: muchos ucranianos en España salvan a familiares gracias a él

Jersón es una de las ciudades más arrasadas por el Ejército de Rusia. Allí, en esa localidad bajo control invasor, vive Vitaly Suárez, el ucraniano de padre español al que tanto hemos visto ayudar en esta guerra. Ahora, tras semanas de supervivencia, cuenta lo difícil que resulta conseguir alimentos y fármacos que reparte casa por casa: muchos son encargos de ucranianos afincados en España que tratan de ayudar a los suyos.

Ilona, desde Valladolid, sobre Vitaly Suárez: "Sin su ayuda es imposible"

Los rostros de las personas a las que ayuda el joven de Jersón desprenden mucha emoción. Ilona, una ucraniana que vive en Valladolid, temía por la vida de sus padres, al estar enfermos y no poder valerse por sí mismos. Por ello, decidió contactar con Vitaly y pedirle que les asistiera.

El padre de Ilona esperaba la ayuda "agotado" y "desesperado" por la situación. "Mi madre está enferma de Alzheimer. Sin su ayuda es imposible. La gente no tiene ni comida ni bebida. Nada de nada", ha explicado la mujer.

La ciudad de Jersón vive sumida en un drama. Según explica Vitaly en sus vídeos: apenas hay dinero en efectivo -"hay largas colas para retirar dinero"-, productos -"casi no queda nada"- y la situación es de verdadera urgencia -"dos personas mayores ni siquiera pueden salir a la ciudad"-. Pero él no para de repartir alimentos. "Nos ha pedido ayuda desde España", comentaba en uno de los vídeos sobre la petición de Ilona.

Elena se queda sin palabras al hablar de Vitaly Suárez: "Es un ángel de la guarda. Está arriesgando su vida"

Y la cosa no queda ahí. Desde Salou, le contactó Xenia, otra mujer ucraniana, para ayudar a su madre. "Sé que si necesita algo, llegará", comenta emocionada sobre la labor de Vitaly en Jersón. "Le llevó un poco de harina y conservas", añade.

Desde Santander, Elena consiguió alimentos para sus padres a través de Vitaly. Se queda sin palabras al hablar de él: "Le encontré en páginas de Facebook, donde decían que daba cuatro patatas y dos zanahorias. No hay palabras en el mundo. Es un ángel de la guarda. Está arriesgando su vida".