Guisos de invierno: qué platos son típicos de esta estación

  • Alubias, fabes, lentejas, callos... toma nota de las recetas más tradicionales, nutritivas y sabrosas de la temporada otoño-invierno

  • Nada mejor que un buen guiso para paliar los efectos del frío.

  • Son comidas para proporcionarnos energía en esta época del año

La temporada otoño-invierno trae de la mano muchas cosas: por ejemplo, la llegada de las setas a nuestros bosques y a nuestras mesas, y también la de los guisos a nuestros fogones. Con el frío siempre apetece más preparar platos más elaborados y contundentes que nos hagan entrar en calor y sentirnos reconfortados y llenos de energía. ¿Cuáles son los guisos de otoño e invierno más típicos?

Guisos de otoño e invierno: qué platos son típicos en la temporada de frío

Los guisos de otoño e invierno han dado lugar a muchas de las recetas más tradicionales de nuestro país: cocido (en todas sus versiones), lentejas, alubias... Las legumbres son las grandes protagonistas de estos platos, así como las verduras de temporada. Quizás lo más característico de estos guisos es su aporte calórico, que suele ser importante. También su capacidad para hacernos entrar en calor y recuperar energía a marchas forzadas: nada mejor que un buen guiso para paliar los efectos del frío.

En la mayoría de los casos, las recetas de guisos de otoño van pasado de generación en generación permaneciendo prácticamente intactas, si bien existen variaciones entre regiones y también versiones más modernas de las recetas más tradicionales. Estos son algunos de los guisos más típicos en España en plena temporada de frío:

  • Alubias. Las alubias son uno de los ingredientes clave en cualquier cocina en cuanto empieza el frío. Existen infinidad de recetas que las contienen y lo cierto es que van bien con casi todo. Alubias con almejas, alubias con bacalao, alubias con setas, alubias con verdura... Se trata de una materia prima económica, altamente nutritiva y deliciosa. Además, existen referencias aptas para los más sibaritas: las Alubias de Tolosa o las de La Bañeza son algunas de las más conocidas por su sabor, así como los famosos judiones de La Granja.
  • Callos a la madrileña. Sin duda la de los callos es otra de las recetas clave del invierno en nuestro país. Este plato tiene como ingrediente principal los trozos de estómago de vaca, cocinados a fuego lento en una cazuela de barro junto con chorizo, morcilla, salsa de tomate y especias como el pimentón. No son aptos para todos los gustos, pero los amantes de este plato no pueden pasar sin él.
  • Cocido. Aunque existen muchas variantes del cocido, la gran ventaja es que todas son deliciosas y perfectas para superar un día de frío. Sus ingredientes principales suelen ser garbanzos, ternera, pollo, cerdo, morcilla, chorizo, verduras como la patata o la zanahoria, y una sopa de fideos. Hay regiones en las que el cocido se sirve en varias etapas, como es el caso de Madrid o León (donde se prepara el famoso cocido de Maragato); en otras, se sirven todos los ingredientes juntos.
  • Lentejas. Odiadas por algunos y amadas por otros, las lentejas no pueden faltar en la lista de la recetas más típicas del invierno. Con chorizo, costillas, arroz, verdura, a la jardinera, a la riojana… Esta legumbre pega con todo y es altamente nutritiva, especialmente en lo que a hierro se refiere.
  • Marmitako. Se trata de un tipo de puchero muy común en el norte de España, y suele contener atún o bonito del norte como ingrediente principal. Verduras como patatas, cebolla, pimientos, tomates... completan este guiso que debe cocinarse en cazuela de barro para sacarle el máximo partido y sabor.
  • Atascaburras. Este plato tiene su origen en Castilla-La Mancha y para elaborarlo necesitarás bacalao previamente desalado, patatas cocidas, aceite de oliva, ajo y nueces. Todo estos deliciosos ingredientes de invierno dan lugar a un puré de lo más sabroso y nutritivo.
  • Pote asturiano. Sin duda uno de los platos más tradicionales y sabrosos de la temporada de frío. No es lo mismo que la fabada, aunque a veces se confundan. El pote asturiano incluye fabes y verduras, así como distintas partes del cerdo. Además, el verdadero pote asturiano se cocina a fuego lento durante 7 u 8 horas.
  • Patatas a la riojana. Otro plato clave de estos meses son las patatas a la riojana, cocinadas con chorizo y pimentón. Tan sencillas como deliciosas, las patatas a la riojana se han convertido en una receta extendida a nivel nacional.