Trucos para hacer una maleta aprovechando todo su espacio: de enrollar la ropa a ponerla en bolsas al vacío

  • El mejor consejo para evitar que tu maleta explote es ser muy cuidadoso a la hora de elegir que llevarás de viaje

  • Voy a seleccionadas todos los elementos que vas a llevar, opta por trucos como enrollar la ropa o guardarla por capas

  • Los recovecos y bolsillos son los mejores lugares para guardar elementos pequeños que tengamos que utilizar más a menudo

Hacer la maleta debería ser un proceso relativamente sencillo si no fuera por el hecho de que siempre vamos añadiendo prendas y objetos que, en realidad, no nos hacen falta. Una buena maleta sería aquella en la que no sobra absolutamente nada, valorando, eso sí, el tamaño que necesitamos en función de cuántos días vayamos a estar fuera y de qué época del año se trate. No es lo mismo viajar en verano (la ropa es mucho más ligera y ocupa menos espacio) que hacerlo en invierno (jerseys guantes abrigos… suelen ser mucho más voluminosos). Si estás preparando tu maleta para estas vacaciones, toma nota de estos trucos para hacer una maleta aprovechando el espacio.

Cómo ahorrar espacio al hacer la maleta

El primer consejo para ahorrar espacio a la hora de hacer la maleta es preventivo: ¿Realmente necesitas llevar todas las prendas que has seleccionado, o podrías prescindir de algunas de ellas? Cuanto más sencilla sea tu forma de vestir y más fácilmente combinables sean las prendas que lleves, menos elementos necesitarás añadir a tu equipaje. Por ejemplo, las camisetas de colores lisos, los pantalones vaqueros, el calzado todoterreno apto para cualquier situación… te permitirán minimizar el número de elementos necesarios.

También es importante evitar los "por si acaso", es decir, aquellas prendas u objetos que incluyes en tu equipaje a pesar de saber de antemano que es probable que no los necesites. Piensa, además, que probablemente podrás hacerte con ropa nueva o cualquier otro elemento que necesites en el lugar al que viajes y que, también probablemente, te apetecerá llevarte algún souvenir de recuerdo.

No olvides, además, que existen muchos objetos pensados específicamente para ocupar poco espacio en tu maleta, como las toallas de microfibra en lugar de las toallas convencionales. Evita también llevar más productos de cosmética de los necesarios y optar siempre por tamaños de viaje, tanto por peso como por volumen. Saca de la maleta esos pesados libros que luego no vas a leer... y sustituye las guías de viaje por unos pocos papeles con la información necesaria o, simplemente, opta por una guía digital.

Una vez seleccionados los objetos que tendrás que meter en tu maleta, toma nota de estos consejos para aprovechar al máximo el espacio:

  • Enrolla la ropa en lugar de doblarla. Es un truco cada vez más extendido y no falta quien considera que realmente no funciona o que la ropa puede estropearse o arrugarse en mayor medida al transportarla de esta manera. Nada más lejos de la realidad: enrollar las prendas de ropa te permitirá ubicarlas de una forma mucho más precisa y sin dejar espacio entre ellas, creando un verdadero tetris en tu maleta. Además, si las enrollas correctamente, conseguirás que se arruguen menos que de la forma tradicional.
  • Guardar la ropa por capas. Si la opción de enrollar la ropa no te convence, otra manera de ahorrar espacio es colocar las prendas por capas totalmente estiradas y dobladas en sus extremos, y utilizando los propios límites de la maleta para ello. De esta forma, aprovecharás al máximo la superficie libre dentro de tu maleta. Simplemente debes ir colocando prenda tras prenda dejando la tela sobrante por fuera de la maleta. Cuando termines de añadir capas, ve cerrándolas una por una, asegurándote siempre que queden bien estiradas. Hay quien recomienda combinar ambas técnicas: guardar por capas las prendas más voluminosas, y aprovechar luego los huecos libres para guardar prendas enrolladas.
  • Guarda la ropa en bolsas al vacío. Este truco es muy efectivo y te permite reducir muchísimo el volumen de la ropa, aunque es posible que también contribuya a que se arrugue más. En función del tipo de viaje de que se trate, puede ser la opción más conveniente, sobre todo si no necesitas ir especialmente bien vestido. Por ejemplo, si tu maleta va a consistir básicamente en ropa de deporte, esta es una opción muy útil para ti. Además, puedes usar las mismas bolsas para aislar la ropa sucia que vayas generando y evitar así malos olores.
  • Aprovecha los recovecos para guardar objetos pequeños. Normalmente los objetos pequeños que vayan a utilizarse de manera más frecuente deben ir en los pequeños bolsillos y compartimentos que incluye tu maleta. Por ejemplo, ropa interior, ropa de baño, cargadores, calcetines, chanclas, gafas de sol… no olvides que el interior de los zapatos es un hueco precioso que puedes utilizar para introducir, por ejemplo, calcetines u otros objetos pequeños.