Covid persistente: qué es y cuáles son los síntomas que presenta

  • Se calcula que entre el 10 y el 15 por ciento de las personas infectadas con coronavirus presentan síntomas a largo plazo

  • Son frecuentes el agotamiento, los problemas cognitivos y otros síntomas de duración prolongada en pacientes contagiados por Covid-19

  • La vacunación y las medidas de higiene siguen siendo la mejor forma de prevención si quieres evitar el Covid

Se calcula que entre un 10 y un 15 por ciento de los pacientes que han pasado por el Covid-19 siguen experimentando síntomas a largo plazo, lo que ha llevado al sector sanitario a plantear la existencia del Covid persistente como enfermedad emergente sobre la que aún deben realizarse estudios. Y es que una de las características de los contagios por el virus SAR-CoV-2 es la variedad de efectos que puede provocar en quienes lo soportan: desde la ausencia total de síntomas durante todo el proceso hasta el extremo opuesto. El agotamiento y los problemas cognitivos son algunos de los síntomas de duración prolongada más frecuentes en los pacientes contagiados por Covid-19. ¿Qué es el Covid persistente y cuáles son sus síntomas?

Covid persistente: qué es y cuáles son los síntomas

Ahora que comienza el verano y que todos nos encontramos un poco más relajados en cuanto a la posibilidad de contagios por Covid-19, conviene recordar que, si bien para muchos los síntomas de esta infección resultan pasajeros y relativamente llevaderos, existe un porcentaje nada desdeñable de la población que experimenta determinados síntomas a largo plazo. Poco sabemos aún sobre el llamado Covid persistente más allá de cuáles son sus efectos más comunes en quienes lo padecen: al tratarse de una enfermedad emergente, es necesario dejar pasar el tiempo y seguir realizando estudios para conocer su incidencia real, así como su duración, que no tiene por qué ser permanente.

En general, la infección aguda por el virus SARS-CoV-2 puede causar diferentes manifestaciones clínicas, principalmente respiratorias, y presentarse de forma asintomática, en un porcentaje elevado de casos. Sin embargo, lo habitual es que aparezcan síntomas y que éstos desaparezcan progresivamente antes de las 4 semanas. En algunos casos pueden aparecer secuelas derivadas del proceso infeccioso, especialmente si se ha desarrollado de forma grave. Así, cuando los síntomas persisten más allá de las 4 o 12 semanas, sin relación con otras enfermedades del paciente, hablamos del llamado Covid persistente.

Esta enfermedad se considera una nueva afección en pacientes que, en primera instancia, fueron infectados por el Covid-19. Por tanto, tal y como recuerda Asepeyo, el Covid persistente no tiene relación con cómo ha sido el proceso durante la fase aguda. Otras formas de llamarlo son Covid prolongado, síndrome Covid crónico, long Covid o síndrome de Covid postagudo.

Además, aún no está muy claro por qué el Covid-19 persiste en unos casos y en otros no. Una posibilidad es que el virus se mantenga en el organismo, originando una infección latente o crónica. También se baraja la opción de que la infección desencadene una inflamación tal que genere una respuesta inmunitaria tardía. La existencia de autoanticuerpos y la consecuente alteración de la función inmunológica es otra posible explicación para esta enfermedad.

Si te preguntas cómo saber si sufres Covid persistente, toma nota de sus principales signos y síntomas:

  • Astenia 
  • Malestar general
  • Falta de concentración
  • Fallos de memoria 

En cuanto a cuáles son los sistemas u órganos más afectados, suelen ser los siguientes:

  • Síntomas generales
  • Síntomas neurológicos 
  • Síntomas psíquicos o emocionales
  • Síntomas asociados al aparato locomotor
  • Síntomas respiratorios 
  • Alteraciones digestivas

Un último dato de interés es que, según una encuesta realizada por la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) y los colectivos de afectados LONG COVID ACTS, el Covid persistente afecta en mayor medida a las mujeres (79 por ciento) que a los hombres. También es más frecuente en la edad media de la vida, si bien puede aparecer a cualquier edad. Para evitarlo, la mejor receta es evitar el contagio a través de las medidas de higiene que se vienen utilizando desde el inicio de la pandemia. Además, la vacunación puede reducir los síntomas de forma significativa en caso de contagio, por lo que podría reducirse también la probabilidad de experimentar síntomas a largo plazo.