Tras el reciente anuncio del riesgo de una nueva pandemia del virus sincitial, ahora hay que sumar la llegada de la subvariante de Ómicron, BQ.1, la cual ya ha aterrizado en España. Este nuevo tipo de COVID-19 ha sido detectado por primera vez en aguas residuales de Cataluña, según han informado desde la secretaría de Salut Pública. Carmen Cabezas, secretaria de la organización, también ha informado a través de una entrevista en RAC1 de que hasta la fecha no se han detectados casos de esta subvariantes en personas.
Además, España está viviendo en las últimas semanas un incremento de los casos de COVID-19. Las últimas cifras publicadas por el Ministerio de Sanidad el pasado 14 de octubre, señalan un aumento en la incidencia, semana dónde se han detectado el doble de casos que en la semana anterior. Concretamente 20.652 casos frente a 10.843.
Estas nuevas variante BQ.1 y B.Q.1.1 tiene su origen en Nigeria, dónde se detectó un caso por primera vez a mediados de julio. Desde ahí, se propagó rápidamente por más de una veintena de países de Europa, América, Asia y Oceanía. Aunque se cree que el número de países en mucho mayor, ya que muchos de estos no cuentan con los medios adecuados para detectar estas variantes.
Estas subvariantes presentas hasta cinco mutaciones respecto a Ómicron, en el caso de B.Q.1.1 contaría con dos extras. La mayoría de estas, pero no todas, afectarían a la proteína S la cual es utilizada por el covid para unirse a las células que infecta. Misma proteína que es detectada por los anticuerpos.
Aunque por ahora no se han podido determinar los peligros que esta variante puede ocasionar en las personas. Aún así, las autoridades sanitarias han pedido extremar la precaución ante la aparición de los siguientes síntomas: malestar general, síntomas gripales, cefalea intensa, dolor de garganta, tos, dolor muscular, secreción nasal y estornudos, episodios diarreicos, dificultad para respirar y alteración del ritmo cardiaco.
La Agencia de Salud Pública del Reino Unido (UKHSA) ha confirmado que actualmente las nuevas tienen una capacidad de transmisión de un 29% más que Ómicron, por lo que han pedido que no olvidemos por completo las medidas de precaución frente al COVID-19, ante el miedo de una cuarta ola.
Hasta la fecha, ómicron sigue siendo la variante dominante en España y en Europa a día de hoy. En las próximas semanas lo casos generales de coronavirus en el continente podrían seguir aumentando y en ellos podría apreciarse un protagonismo cada vez mayor de esta nueva variante.