Personas del espectro arromántico: Cómo son y cómo viven sus relaciones

  • Explicamos que es arromanticismo y por qué se caracterizan las personas dentro de este espectro

  • Un arromántico es alguien que no experimenta atracción romántica, pero eso no significa que no tenga capacidad de amar o que no pueda tener pareja

  • Ser arromántico no tiene nada que ver con ser asexual, aunque en algunos casos correlacione

“Un arromántico es alguien que no experimenta atracción romántica”, dice en su perfil de Tweeter la cuenta @arrománticos, donde personas que se identifican dentro de este espectro comparten sus experiencias, vivencias, puntos de vista.

¿En qué consiste este espectro arromántico exactamente? ¿Tiene que ver con la enorme cantidad de orientaciones sexuales que venimos registrando en la sociedad actual? ¿Es el arromanticismo una orientación sexual más?

No, el espectro arromántico no tiene nada que ver con la asexualidad, aunque en algunos casos correlacione, como indica este estudio realizado por la campaña internacional Ace Week que muestra que cerca del 16 % de las personas asexuales se consideran también arrománticas. 

Una persona arromántica no siente ningún tipo de atracción romántica hacia nadie ni interés por mantener una relación romántica con nadie. Ahora bien, ¿qué significa esto exactamente? ¿qué es una relación romántica?  

Qué es ser romántico

“Sentimentalidad excesiva”. Esta es la cuarta acepción que el diccionario de la RAE contempla del término ‘romanticismo’. La definición, como vemos, es tremendamente pobre.

La experiencia y el sentido común nos permiten entender desde la intuición -más que desde nuestra mente racional- que el romanticismo se refiere a una serie de comportamientos y actitudes encaminados a favorecer la conexión en una pareja: Una pareja que independientemente del punto en que se encuentre de la relación, de manera más o menos consciente, comparte un proyecto de vida en común.

Los comportamientos y actitudes románticos son todos esos detalles, como las muestras de interés y atención hacia el otro u otra, las palabras y gestos de cariño y la expresión sincera de los propios sentimientos hacia la pareja, que contribuyen a crear (primero) y mantener (después) esa conexión profunda.

Por esa razón, muchos psicólogos y expertos en relaciones de pareja hablan del romanticismo como pieza clave para mantener esa conexión cuando la relación se ha enfriado. Como explica la terapeuta de pareja panameña Mixcela Salazar, en este artículo “Una palabra bonita, un cumplido o un beso son gratis” y contribuyen a que la peligrosa rutina no haga perder la chispa del amor.

Qué es ser una persona arromántica

Por tanto, ser arromántico significa sencillamente no sentir ni el deseo ni el interés por desplegar este tipo de comportamiento y actitudes socialmente consideradas como románticas hacia los demás.

Podríamos pensar que una persona que no experimenta este tipo de atracción romántica hacia nadie (ni desea entregarlo ni desea recibirlo) es porque en el fondo no tiene interés en conectar con otra persona de manera tan profunda como para compartir un proyecto de vida en común.

Algo así es como Cata, una mujer de 45 años, que no quiere compartir su nombre real, interpreta su arromanticismo “Me siento atraída sexualmente tanto por hombres como por mujeres y he tenido varias relaciones de pareja, pero nunca han durado mucho o han sido muy irregulares. Básicamente me duran lo que me dura el interés sexual. Y he de decir que, en algunas ocasiones, mientras ha habido ese interés sexual sí he sido algo romántica, o más que serlo yo es que no me ha molestado el romanticismo de mi pareja sexual de ese momento. Vivo mi arromanticismo como una manifestación de mi personalidad independiente y excesivamente autónoma. Por ejemplo, ni tengo -ni nunca he tenido- ningún deseo de formar una familia ni de compartir un proyecto de vida con nadie. Creo que en el fondo todas esas actitudes romanticas van encaminadas a crear y fortalecer vínculos de pareja romántica que para mí tienen mucho que ver con el interés por compartir en régimen de exclusividad un proyecto de vida…si no hay interés por crear esos vínculos de pareja romántica, tiene sentido que no haya interés ni deseo de desplegar romanticismo”, explica.

Claro que sienten amor

Una persona en este espectro arromántico no siente atracción romántica, no se enamora ni tiene interés en vincularse de este modo, pero sí se vincula de muchas otras maneras. Tampoco son personas frías, distantes o asociales.

“Claro que tengo sentimientos y capacidad de amar y me siento muy completa en ese sentido con mi familia y amistades con las que tengo una relación muy estrecha y profunda. Únicamente no tengo esos sentimientos románticos”, explica Cata.

El caso de Luda Merino es algo diferente porque además de arromántica esta joven es asexual. Una condición que compartió en un hilo de tweeter

 “En mi caso la asexualidad y el arromancismos van de la mano, explica. No siento nada de nada en tema amoroso-sexual”.

Luda sí he experimentado las críticas o los comentarios despectivos sobre su condición.“Es verdad que se nos dice que si somos unos sosos, que si no tenemos amor para los demás y es una tremenda tontería: tenemos madres, padres, la gente tiene hermanos, la gente tiene primos y la gente tiene amigos con los que está continuamente. Y yo tengo a mis mejores amigos y uno de ellos la gente hasta se cree que somos novios porque la confianza que hay entre nosotros es la que hay entre una pareja o la que hay entre dos hermanos; es una relación muy cercana”, explica.

Puntualiza Luda que si alguna vez se ha sentido mal o ha sufrido por esta condición de arromántica y asexual no ha sido por algo suyo, porque sintiera que algo estaba mal en ella, sino precisamente por los comentarios de los demás.

“Para mí la vida es exactamente igual que la de cualquier persona, pero sin todo ese rollo. Y todos los problemas que he tenido derivados de todo esto de ser asexual y arromántica y de que no me gusta nadie y de que no me ponga nadie vienen siempre por los comentarios de la gente porque siempre hay algún gilipollas que te dice que estás enfermo (…) Gente muy cerrada de mente y obsesionada con que yo estaba enferma y que tenía que tener un problema. Pero el resto de mi vida fue normal…es vivir como de cualquier otra manera, o como cuando eres niño que te importa tres pepinos este o aquel”.

¿Cómo anhelar algo que no has experimentado nunca y que solo conoces por lo que te cuentan los demás? Tal vez esta idea nos ayude a comprender mejor a las personas arrománticas y/o asexuales como Cata y Luda.

Sí pueden tener pareja

Otra de las dudas que suelen surgir cuando hablamos de este tema es si las personas arrománticas pueden o no tener pareja. La respuesta es sí, sí que pueden tener pareja y, de hecho, muchas la tienen tan sólidas, duraderas y satisfactorias como cualquier otra. Lo que ocurre es que estas relaciones no se sustentan en la narrativa del amor romántico sino en acuerdos que se van trazando a lo largo de la relación.

Por qué se llama espectro arromántico

Los casos de Cata y Luda, tan diferentes, nos permiten observar cómo hay diferentes tipos de personas arromáticas. Por esa razón hablamos de espectro y no de categoría. Dentro del espectro hay lugar para múltiples matices. Puede que para algunas personas arrománticas los gestos de cariño y ciertas conductas tipificadas como románticas sean agradables en determinadas circunstancias como le pasa a Cata; y puede que para otras no lo sean bajo ninguna condición.

Otra idea importante es que las personas arrománticas no son personas que rechazan el romanticismo o que están en contra del romanticismo de los demás, simplemente no les interesa el tema.