¿Te mareas cuando usas tus gafas de realidad virtual? Tiene explicación y puedes evitarlo

Nauseas, mareos, un malestar general que puede derivar en vómitos, la misma sensación que al viajar en barco, en coche o al subir a una atracción. Si experimentas estos síntomas cada vez que utilizas unas gafas de realidad virtual es probable que sufras ‘motion sickness’, un término que se ha renombrado para dar nombre a esta sensación cuando deriva de esta tecnología, pero que no es nuevo y ya se conocía como cinetosis o enfermedad del viajero.

Este mareo tras utilizar las gafas de VR es una respuesta fisiológica normal ante una percepción inusual de movimiento, ya sea real o aparente, que se produce al entrar en conflicto el sistema visio-vestibular.

“El sistema vestibular aportaría información de movimiento, mientras el sistema visual informaría de un ambiente estacionario (que se mueve con el sujeto). Esta situación, produciría una estimulación excesiva en las estructuras internas del oído, que regulan el equilibrio, y por eso aparecen los síntomas del mareo: palidez, sudor frío, náuseas o vómitos”, explica la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL CCC).

Los síntomas pueden estar precedidos de “bostezos, hiperventilación, salivación, palidez, sudación fría abundante y somnolencia”, según la Clínica Universidad Navarra. Además, señalan, “puede presentarse aerofagia, vértigo, cefalea, malestar general y fatiga”.

Sobre la evolución de estos síntomas, avisan: “Cuando aparecen las náuseas y vómitos, el paciente se encuentra débil y es incapaz de concentrarse. Con la exposición prolongada al movimiento, el paciente se puede adaptar y recuperar el bienestar. No obstante, los síntomas pueden volver a aparecer si aumenta el movimiento o se reanuda tras una parada breve”.

Además, de prolongarse, “puede provocar hipotensión arterial, deshidratación, inanición y depresión” y “puede ser una complicación grave en pacientes con otras enfermedades”.

Todo el mundo puede sufrir cinetosis en algún momento de su vida. Sin embargo, según la SEORL CCCC, es más probable, entre otros colectivos, en pacientes con migrañas y en niños de entre 7 y 12 años. Además, es más frecuente que se dé cuando los movimientos son lentos y pendulares e influyen las expectativas que una persona tenga sobre si va a marearse o no. Lo mejor es pensar que no te vas a marear, dicen.

No obstante, evitar la causa, por supuesto, es la mejor de las soluciones, pero si estás decidido a usar las gafas de VR, al igual que ocurre con los viajes, existen algunos trucos que pueden ayudarte a que la experiencia no sea un auténtico fastidio.

No hacer comidas copiosas antes de utilizar este dispositivo, ventilar adecuadamente la habitación donde vamos a estar y evitar los malos olores son algunos de los consejos de portales especializados.

Hay quienes recomiendan el jengibre, una raíz que puede ayudar con estos efectos indeseados ya que el gingerol, uno de sus componentes, es una sustancia picante que estimula el flujo de saliva y la secreción de jugos gástricos.

Si todo esto no funciona, existen medicamentos que pueden adquirirse directamente en las farmacias, aunque lo mejor es siempre consultar previamente al médico. 

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