Obesidad

David Buchebner, endocrino: "Muchos jóvenes siguen subestimando el impacto de la obesidad y desconocen lo que puede provocar"

David Buchebner, director de control de calidad y médico especialista en medicina interna y endocrinología en Yazen
David Buchebner, director de control de calidad y médico especialista en medicina interna y endocrinología en Yazen. Ciprian Gorga
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Un nuevo estudio publicado en European Heart Journal por científicos suecos alerta de que la obesidad ha superado al tabaquismo como el principal factor de riesgo entre los adultos jóvenes (18-59 años) que han sufrido un primer infarto de miocardio.

El exceso de peso se ha convertido en la nueva 'epidemia silenciosa' que dispara el riesgo cardiovascular en personas cada vez más jóvenes.

En Informativos Telecinco hemos hablado con David Buchebner, director de control de calidad y médico especialista en medicina interna y endocrinología en Yazen, quien asegura que aun “muchos jóvenes siguen subestimando el impacto de la obesidad”.

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El clínico asegura que muchas veces se desconoce lo que la obesidad "puede provocar silenciosamente hipertensión arterial, diabetes y problemas de colesterol” un combo perfecto que “aumenta el riesgo de sufrir un infarto a una edad temprana”.

Cómo revertir esta ‘epidemia silenciosa’

Debemos tratar la obesidad como una “enfermedad crónica” y no como una simple cuestión estética o de “elección de estilo de vida” explica David Buchebner, quien asegura que se debe combatir a tres niveles.

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  • Salud pública y educación para crear entornos más saludables, con un acceso más fácil a alimentos nutritivos y oportunidades para realizar actividad física.
  • Intervención médica temprana para detectar y gestionar los factores de riesgo antes de que se produzcan daños.
  • Nuevos tratamientos, como los agonistas del receptor GLP-1, que han transformado nuestra capacidad para tratar la obesidad de forma eficaz. Por primera vez, disponemos de medicamentos que producen una pérdida de peso sostenida y reducen el riesgo cardiovascular, lo que ofrece a los pacientes una oportunidad real de prevención.

Medidas disuasorias

El endocrino destaca que en otros países políticas como el “etiquetado claro” las restricciones publicitarias de “alimentos poco saludables dirigidos a niños y los impuestos sobre las bebidas azucaradas” son pasos importantes para poder reducir el consumo, pero no suficientes. “Los jóvenes, en particular, responden mejor a los mensajes de empoderamiento que a los de miedo”.

El médico especialista alerta de la peligrosidad de la obesidad que está provocando un “aumento en el número de ataques cardíacos en adultos jóvenes”, pero señala que aún estamos a tiempo de atajarlo, “la buena noticia es que contamos con herramientas”.

“Se necesita es un cambio de mentalidad: reconocer la obesidad como una enfermedad, tratarla con seriedad y brindar a las personas el apoyo que necesitan para prevenir los ataques cardíacos antes de que ocurran”, recalca.