La dura carta de Chico Flores, jugador del Fuenlabrada: "Son ya dos confinamientos separado de mis hijos"

  • "Momentos impagables que son oro puro y que no vuelven ni volverán"

Chico Flores, jugador del Fuenlabrada, equipo que comenzó una pesadilla con el coronavirus hace 10 días y que quedó confinado en un hotel de A Coruña tras registrar numerosos positivos en su expedición, ha compartido una carta a través de sus redes sociales en la que explica la dureza de la situación durante estas semanas. El defensa de 33 años fue uno de los integrantes más perjudicados por el virus. Tras dar positivo, fue ingresado en el hospital Quirón, donde reconoció haberlo pasado bastante mal.

"Ya son muchos días encerrado en una habitación, escuchando las gaviotas y el sonido del mar por una pequeña ventana, sonidos que te hacen pensar y reflexionar como deportista, como padre, pero sobre todo como persona", arranca el texto de Flores.

"Son ya dos confinamientos separado de mis hijos. Momentos impagables que son oro puro y que no vuelven ni volverán. Momentos como las primeras palabras de mi hijo Gael o los primeros andares de mi hija Chloe. Momentos en los que tristemente no he podido estar a su lado para disfrutarlos por culpa de este maldito virus", continúa.

"La mayoría de la humanidad piensa que no es peligroso después de haber acabado con miles de personas inocentes. Virus que como nos descuidemos y no sigamos las indicaciones sanitarias que nos dan día a día, volverá a actuar sin mirar razas ni edades", añade el futbolista advirtiendo sobre la gravedad del SARS-CoV-2.

"Deportivamente, son momentos complicados. Al final, nos vimos envueltos en un problema y doblemente perjudicados. Tanto deportivamente, como en la salud, que es lo prioritario y lo más importante ya que sin ella no somos nadie. Problema que esperamos, deseamos y confiamos en que se solucione lo antes posible y a favor de nosotros después de demostrar con indicios suficientes nuestra inocencia", concluye en relación al caso Fuenlabrada.