Más allá de las patologías previas y la edad: otras causas que convierten a los mayores en los más afectados por el coronavirus

  • El 95,5% de los fallecidos por COVID-19 son mayores de 60 años

  • Ya han muerto más de 9.000 ancianos que vivían en residencias en España

Las personas mayores son uno de los principales grupos de riesgo del coronavirus. Las cifras oficiales señalan que el 95,5% de los fallecimientos por COVID-19 en España corresponden a personas de más de 60 años y, de ellos, la mayoría son hombres. Las principales causas de esta alta mortalidad son la edad y la existencia de patologías previas, pero podría haber otros condicionantes. El demógrafo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Antonio Abellán, es uno de los mayores expertos del país en envejecimiento de la población y lanza otras hipótesis a tener en cuenta en una entrevista con la agencia Efe. A pesar de todo, señala que toda esta información debe tomarse con cautela, ya que los datos disponibles aún son imprecisos.

Posibles causas de la alta mortalidad en mayores de 60 años

La crisis del año 2008: La crisis económica que empezó en el 2008 dejó a casi seis millones de personas sin empleo, lo que condujo a muchos hogares a una situación muy precaria. Muchas familias tuvieron que recurrir a los más mayores para subsistir, viviendo en sus casas o compartiendo su pensión o ayuda a la dependencia para cubrir las necesidades básicas. Solo cuando los problemas de las personas mayores de 65 años eran muy graves y excesivos para la convivencia familiar se recurría a las residencias.

Es por ello que, según Abellán, “podrían haber llegado a las residencias muy deteriorados, especialmente frágiles. Irrumpe el coronavirus y diezma a la población residente”. Es decir, que al ingresar en residencias pacientes con un estado de salud muy frágil, el coronavirus lo ha tenido más fácil para atacarles.

Las últimas campañas de la gripe y neumonía: Los dos últimos inviernos han sido más suaves, por lo que las campañas de gripe y neumonía pudieron ser más leves que en otros años. "Si se confirmasen estos extremos, podría haber sucedido que en años anteriores se produjera una mayor supervivencia de mayores y muy mayores, que en otras circunstancias hubiesen muerto”, explica Abellán. Esto conlleva que, en la actual pandemia, “tendríamos un número alto de personas mayores y muy mayores (más de 80 años) más débiles, más frágiles”.

La vida en la residencia de ancianos: Abellán considera que puede que no se haya prestado la suficiente atención por parte del sistema de salud a los mayores que viven en residencias. Dice que no se sabe si muchos de los fallecidos supuestamente por coronavirus realmente murieron de eso, ya que tenían patologías previas y no se les ha hecho el test de detección del virus. "Quizá un descuido general (social, político, sanitario) ha podido influir en esta sobremortalidad en residencias", dice.

Nacimiento en tiempos difíciles: Los mayores de 80 años han nacido en tiempos difíciles, como la Guerra Civil. Aunque ahora viven en ciudades, proceden de un mundo rural en el que los recursos eran muy escasos y el nivel educativo bajo. Todas esas condiciones que pasaron en su infancia pueden haber afectado a su desarrollo y a su salud cuando han llegado a la vejez.

Mismo patrón que la gripe: El demógrafo cree que el patrón de edad de los fallecidos por el COVID-19 es muy similar al de los de la gripe y la neumonía. En el caso del coronavirus, los muertos mayores de 60 años suponen el 95,5% del total. En el caso de la gripe y la neumonía, el 95,8%.

Mortalidad masculina

Abellán también ha analizado porque el virus incide más en la mortalidad masculina que en la femenina: “Puede ser porque tenemos generaciones con trayectorias hombre-mujer muy distanciadas en cuanto a hábitos y estilos de vida (más consumo de alcohol o tabaco y más sobreesfuerzos por parte de los hombres), lo que explicaría ese posible exceso de sobremortalidad”.

Más de 9.000 fallecidos en residencias en España

La crisis del coronavirus ha dejado solo en España más de 9.000 fallecidos en residencias de ancianos. Esta cifra triplica al número de mayores muertos en hospitales.

La región más afectada es la Comunidad de Madrid, donde ya han fallecido 4.250 ancianos que vivían en residencias. Le siguen Castilla y León (1.362) y Cataluña (1.123). En el lado contrario encontramos a Baleares y Canarias, que acumulan 22 y 8 fallecimientos por COVID-19, respectivamente.

Los últimos datos oficiales señalan que el número de personas fallecidas en total por culpa del coronavirus supera las 18.000 (567 en las últimas 24 horas) y el número de contagiados es de 172.541. Las personas que ya se han recuperado son 67.504.