Desvelan el plan nacional contra el Alzheimer que prepara el Gobierno

  • El nuevo Gobierno tiene un plan

  • Cerca de 800.000 personas padece alzheimer en España

  • En España, entre un 3 y un 4% de la población de entre 75 y 79 años está diagnosticada de alzheimer

En una semana en la que se han dado a conocer más descubrimientos sobre lo que se esconde tras el alzheimer Uppers desvela en exclusiva el plan nacional que el Gobierno tiene preparado para combatir esta enfermedad que afecta a unas 800.000 personas en España, según la Sociedad Española de Neurología (SEN). En España, entre un 3 y un 4% de la población de entre 75 y 79 años está diagnosticada de alzheimer, unas cifras que aumentan hasta el 34% en mayores de 85 años. Además, la SEN estima que alrededor del 15% de la población mayor de 65 años padece deterioro cognitivo leve y que, en el 50% de los casos, sería debido a la enfermedad de alzhéimer.

Estamos pues ante una enfermedad que no es ya solo la causa número uno de discapacidad en personas mayores en España, sino que también es la patología que genera uno de los mayores gastos sociales: el coste por paciente de Alzheimer se estima que ronda entre 27.000 y 37.000 euros anuales en España. Por eso es vital que haya un plan. Y es lo que ha desvelado Uppers que desgrana los 20 puntos fundamentales de este plan (para saber cuáles son, pinche aquí).

Estamos ante cuatro puntos cardinales en los que avanzar. En primer lugar se quiere mejorar la información y cambiar la visión que tenemos sobre el Alzhéimer. En segundo, se pretende situar a la persona en el centro de la atención sanitaria y social gracias a dar luz y concienciar a la población de los factores de riesgo, así como los tratamientos más adecuados. Porque cualquiera de nosotros puede ser víctima de esta enfermedad en seguro. El tercer eje se centra en el derecho, la ética y la dignidad de la persona y pretende mejorar los servicios, apoyos y prestaciones para avanzar en la atención a las personas en distintos ámbitos. Finalmente, el cuarto eje pone el foco en medidas para fomentar la investigación, la innovación y el conocimiento

Este plan convive con noticias sobre avances en las últimas horas en referencia a descubrimientos sobre la enfermedad, donde se van dando pasos para conocerla y poder tratarla sin pausa. En este sentido, hace pocas fechas se supo que investigadores del Barcelona Beta Brain Research Center (BBRC) de la Fundació Pasqual Maragall habían descubierto que las personas con insomnio tienen un peor rendimiento cognitivo y un menor volumen en algunas regiones cerebrales que se afectan en etapas tempranas del alzheimer. ”Estos hallazgos sugieren la presencia de procesos de inflamación cerebral que podrían tener un papel clave en la asociación entre la calidad del sueño y el Alzheimer”, ha destacado el primer autor del estudio, Oriol Grau. El trabajo abre la puerta a una nueva línea de investigación que permitirá analizar de forma exhaustiva la relación entre la neuroinflamación, el sueño y la demencia, al relacionar la pre sencia de insomnio con una elevada vulnerabilidad al Alzheimer.

Y esta misma semana se ha desvelado que estar activo física y mentalmente retrasa el desarrollo de la demencia frontotemporal, incluso en personas cuyo perfil genético hace que el desarrollo eventual de la enfermedad sea prácticamente inevitable, según una nueva investigación realizada por científicos del Centro de Memoria y Envejecimiento de la UC San Francisco (Estados Unidos). O que el uso de medicamentos antipsicóticos está asociado con un mayor riesgo de lesiones cerebrales en personas con enfermedad de Alzheimer, según un estudio publicado en la revista científica 'Journal of the American Geriatrics Society'.

Además, el uso de medicamentos antipsicóticos se relacionó con un riesgo un 22 por ciento mayor de lesiones cerebrales traumáticas: 0,9 frente a 0,72 por cada 100 personas/años. Cuando se compararon estos fármacos, los usuarios de quetiapina tuvieron un riesgo un 60 por ciento mayor de lesiones cerebrales traumáticas en comparación con los que tomaban risperidona.

"Las personas con enfermedad de Alzheimer tienen un mayor riesgo de caídas, lesiones en la cabeza y lesiones cerebrales traumáticas y un peor pronóstico después de estos eventos en comparación con aquellos sin enfermedad de Alzheimer. Por lo tanto, es importante evitar aumentar aún más el riesgo con antipsicóticos en esta población vulnerable, si es posible", señala el autor principal, Vesa Tapiainen, de la Universidad del Este de Finlandia. Son solo dos de las investigaciones más recientes, pero hay más. Porque los investigadores tienen en el foco el Alzheimer y parece que el nuevo Gobierno también. Al menos tiene un plan para que no sea esa enfermedad desconocido por muchos y que tanto se teme.