Enfermeras y auxiliares del hospital Gregorio Marañón de Madrid han tenido una brillante idea para recoger cada pequeño logro conseguido por los bebés ingresados en la UCI de neonatos. Escriben diarios personalizados, con mucho mimo y cariño, para que las madres puedan leer la evolución.
Un pequeño libro personalizado que, en esos días, es todo para sus madres. "Hola Hugo, soy Miriam, tu enfermera del turno de la noche, has iniciado la alimentación por boca", lee Maite, la madre del pequeño, quien confiesa que "no quería leer el libro", porque "sabía que se iba a emocionar".
La evolución del pequeño Hugo está en un diario, abierto al llegar a la UCI con 900 gramos de peso. "Llegarás a la meta", señala otro de los versos. El objetivo de las sanitarias, que estos padres se llevaran recuerdos de toda la estancia del bebé.
Auxiliares y enfermeras escriben, dibujan, recortan, pegan, sin perder detalle, de la incubadora, del aumento de peso, del día que llegó el hermano, de las diminutas huellas... "Es mucha emoción y la sensación de que le estás llenando un vacío", comenta Natalia Sánchez, auxiliar del centro hospitalario. Hay un diario de vida para cada neonato.
Gael nació con 500 gramos y cuatro meses antes de lo previsto, y también cuenta con su propio diario. También Yolein y su mamá notan cariño en cada línea. "Me he emocionado mucho por los detalles y por como ella lo cuenta", señala la progenitora. Ya se han entregado 40 historias inolvidables de estos grandes pequeños.