Buen ritmo de ocupación hotelera en la Comunidad Valenciana pese al estado de alarma en Madrid

  • Turistas de comunidades sin restricciones se decantan por la costa valenciana

  • La ocupación ha subido hasta el 60% en algunos hoteles de la C. Valenciana

Muchos madrileños que tenían previsto desplazarse a las zonas de costa han tenido que suspender sus planes debido a la aplicación del estado de alarma en la Comunidad de Madrid. Sin embargo, por ejemplo, en la Comunidad Valenciana la ocupación ha subido hasta el 60% en algunos complejos hoteleros por los desplazamientos que están realizando españoles de otras zonas durante este puente.

También hay mucha gente de Madrid con segunda residencia que ya lleva tiempo viviendo en la comunidad autónoma valenciana. Los paseos y las calles de Benidorm se llenan, también incluso para buscar la llamada de la suerte que trae la Lotería de Navidad.

Las terrazas recuperan un poco de vida gracias al turismo nacional, un turismo de proximidad que también ha ayudado a los hoteles a recuperar algo de actividad. Los establecimientos intentan alargar el verano ante la inminente pesimista campaña de este próximo invierno.

Los parques de atracciones y ocio pierden cerca del 80% de afluencia

Mientras, los parques de atracciones y ocio españoles han perdido cerca del 80% de afluencia e ingresos este verano, según datos de la Asociación Española de Parques de Atracciones y Temáticos (AEPA), que reclama la vuelta al IVA reducido como alivio inmediato para el sector, y confía en que las ayudas ofrecidas a través de los planes de recuperación de la Unión Europea lleguen antes de que muchos de ellos tengan que cerrar y se pierdan miles de empleos.

La llegada de la pandemia del coronavirus a comienzos de marzo y el decreto del estado de alarma obligó a muchos parques de ocio españoles a echar el cierre durante meses y la vuelta a la operación tuvo que hacerse tras unas inversiones de más de 10 millones de euros en sus instalaciones para extremar la medidas de seguridad.

Sin embargo, los escasos visitantes registrados este verano debido en muchas ocasiones a los rebrotes originados por el coronavirus y los elevados costes fijos de mantenimiento y seguridad de las instalaciones están poniendo en riesgo los más de 85.000 empleos que genera el sector.

Los parques han abierto este verano sabiendo que sus cuentas de resultados iban a estar muy afectadas e iban a tener un descenso en todos sus parámetros. De hecho, las pérdidas han sido del 80% en afluencias e ingresos respecto a 2019.

"Nos ha afectado mucho el tema de los rebrotes que han surgido mucho antes de lo que estaba previsto, y las restricciones y confinamientos impuestas en muchas regiones nos han terminado de matar en un negocio tan estacional como el nuestro", lamenta el presidente de la Asociación Española de Parques de Atracciones y Temáticos y director general de Isla Mágica, Guillermo Cruz, quien asegura que no han tenido más remedio que ir adaptando el calendario y la oferta a la situación.

La Asociación reclama por ello ayudas puntuales al sector como se han realizado a otros sectores de la economía española, con medidas tales como la extensión de la duración de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) por fuerza mayor hasta final de año, la exoneración del abono de la cuota de la Seguridad Social durante ese período, la habilitación de una línea especial de financiación o la concesión de ayudas estatales directas al sector similar a las aprobadas para otras empresas turísticas y culturales.