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La incidencia acumulada en España supera ya los 100 casos por cada 100.000 habitantes y los especialistas advierten sobre el nuevo escenario epidemiológico. Los megabrotes por fiestas y botellones de jóvenes, la entrada de nuevas variantes por medio de turistas y la vacunación, que requiere mayor esfuerzo, son algunos de los nuevos retos.
La variante delta amenaza a España, ya está provocando estragos en Portugal y es la predominante en Reino Unido. Joan Caylà, miembro de la Sociedad Española de Epidemiología (SEE), explica a Informativos Telecinco las consecuencias de este caldo de cultivo perfecto, --como dijo el propio Fernando Simón-, para un repunte de contagios con la variante más transmisible llamando a las puertas.
Joan Caylà tiene claro que sufriremos una nueva ola centrada en los jóvenes, con picos de contagios pero no con esas muertas y ocupaciones de camas de UCI de otras olas. "Sí veo una nueva ola, de hecho la incidencia está subiendo. Y la tendencia ahora es que siga incrementándose, porque si miras las cifras de nuevos infectados por grupos de edad, llama mucho la atención que en el tramo de edad de 15 a 29 años sube, mientras que en otros grupos de edad la incidencia sigue bajando, o como mucho está estabilizada. Estamos en riesgo de tener una pequeña ola que afectaría sobre todo a gente joven, pero tenemos la gran suerte de tener a la gente mayor con más riesgo vacunada. Si no fuera así, ahora no hablaríamos de torneos de fútbol o vacaciones, hablaríamos de muchas muertes".
Y sí, su objetivo son los jóvenes, que ponen todo a su favor con sus botellones y falta de responsabilidad. Pero el experto alerta de sus efectos colaterales. "Cuidado de 60 a 69-70 años que hay un 94,1% que solo tienen una dosis puesta, mientras un 48,9% ha recibido la pauta completa y un 5,9% no tiene ninguna dosis. Y en este grupo de edad existe el riesgo, porque de cada 100 casos de covid, la probabilidad de tener que ingresar es del 20% y de ir a UCI del 5%, y de que mueran un 1%, a groso modo. En jóvenes, el porcentaje sería más favorable. El gran problema es que no hay vacunas para todos. Se ha priorizado que a mayor edad más riesgo. Ahora ya se empieza a vacunar a partir de 30 años y se supone que a finales del verano se podrá ya vacunar a partir de 15 años".
La pandemia, pues, no ha acabado. "Las nuevas variantes preocupan, y no respetar las medidas covid provoca un aumento de contagios. Por ello, debemos observar qué medidas toman otros países que ya las han sufrido. "Lo que tenemos que hacer es mirar en otros países, en esto van 'más adelantados'. Por ejemplo, Reino Unido, que sufre la variante delta desde hace ya mas tiempo que nosotros, presenta un preocupante aumento de la IA, a pesar de que tienen una cobertura vacunal mejor que nosotros".
Los afectados por el 'megabrote' de Mallorca se acercan a los 1.800 contagios. Los viajes de fin de curso a la capital balear han levantado controversia después de haber provocado uno de los mayores brotes en lo que llevamos de pandemia. "Se vieron casi en directo imágenes que preocuparon mucho. Con colegas epidemiólogos lo comentamos un poco, el tema de los jóvenes, por ejemplo, en la plaza de toros de Palma, haciendo una gran fiesta. Estaban hacinados, sin distancia, sin mascarilla, y claro, es un riesgo. Al cabo de nada se ha visto este brote, que es un brote de brotes. Hay brotes de la variante delta y de la variante alfa. Además, ha habido gente joven que igual ha ido allí de diversas comunidades autónomas y algunos igual traían el virus de su CCAA y allí la extendieron, como también es posible que algún virus estuviera ya en la isla y de ahí pasara a la gente joven". El experto advierte que el covid no es una broma. "Cuando hay tanto contagio, algunos lamentablemente irá a la UCI y si tenemos muchos en esta unidad, alguno pueden morir". Así que, precaución.
Los datos hablan por sí solos aunque no los queramos ver. El 80% de los nuevos casos de covid detectados durante la última semana en Cantabria correspondía a menores de 40 años, y de ellos, el 65% está por debajo de 30 años. Las autoridades piden precaución ante las fiestas y celebraciones en verano. "No solo ha habido el brote de Mallorca, se han documentado brotes en Menorca, en Canarias, en Tenerife, también en la Costa Brava, Lloret, Salou, Cataluña, y probablemente en algunos sitios que aún no se haya detectado bien si ha habido brotes. Por tanto, hablamos de mucha gente afectada".
Ante un hecho como el megabrote, el experto considera que aislar, aunque se haya hablado incluso de secuestro, es lo que hay que hacer. "Lo importante, cuando hay un brote, es que se pueda investigar bien y que los casos sean aislados para que no puedan contagiar a otra gente. Y los que deban hacer cuarentena, que estén bien cuarentenados para evitar que si desarrollan la infección afecten a otros".
Por eso considera que se hizo bien en Baleares. La cifra de contagios detectados entre los estudiantes aún aislados en Mallorca por el 'macrobrote' asociado a viajes de fin de curso se eleva ya a 80 casos, de los que 16 se encuentran ingresados en el Hospital Son Espases. "Hemos visto un hándicap, en el sentido de que algunos padres han sido muy críticos con las cuarentenas, pero hay que tener en cuenta que si no se hubieran hecho o no se hubieran llevado a cabo correctamente, lo que hoy o ayer eran 1.200 casos en una semana pueden ser 3.000 o 4.000. Y en unas semanas más".
En cuanto a los botellones el consejo es mirar a los países asiáticos donde son un delito contra la salud pública. Ahora estamos en una época de crisis sanitaria y hay que ser muy estricto, considera el experto. "Hay que prevenir que la población joven asuma el riesgo que supone. Se ha visto en Mallorca ahora con gente joven ingresada en hospitales por una infección evitable. De momento tenemos uno en la UCI, si no se comportan bien aumentarán los casos". Mascarilla, distancia social y control del alcohol son vitales. Hay que tomar nota. El coronavirus no se ha ido.