Esta es la receta del que, para mí, es el plato perfecto para deleitarse con el placer de ver llover convirtiéndote en un auténtico sibarita del chaparrón.
SOPA DE CEBOLLA
Ingredientes:
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 3 cebollas medianas picadita
- 1 ajo puerro picadito
- 1 cabeza de ajos picaditos
- 1 cucharada de pimentón molido
- 1 hoja de laurel
- agua
-sal y pimienta al gusto
Pasos a seguir:
En una cacerola grande calienta el aceite y sofríe la cebolla, el ajo puerro y el ajo.
Agrega el pimentón (la sopa será más rica se es picante), una hoja de laurel y cubre con agua.
Calienta hasta que hierva.
Reduce el fuego manteniendo un hervor suave por 20 minutos.
Prueba y ajusta la sazón.
Añade un poco más de pimentón por encima y sirve la sopa en tu tazón favorito.
Una sugerencia de presentación es ponerle picatostes y, si quieres, añade un huevo para que se escalfe en el último hervor.
Reforzarás tus defensas
Con esta rica sopa no solo vas a disfrutar de su sabor, sino que reforzarás tus defensas contribuyendo a inmunizarte frente a cualquier agente patógeno que quiera fastidiarte.
Lo cierto es que cuando llueve apetecen otros platos en nuestra mesa, generalmente calientes, aunque fuera no haga frío. Las migas son un plato típico de los días de lluvia y conocidas en toda España, tenemos diferentes variedades:
Las migas manchegas o ruleras: Habituales en La Mancha y se preparan con pan duro. Debes trocear el pan y dejarlo remojar en agua y sal durante unas horas, y después freírlo con aceite y ajo, dándole vueltas continuamente para evitar que se pegue a la sartén. Se acompañan de longaniza y tocino. Aunque también se pueden añadir uvas, granada o melón.
Las migas aragonesas: Se realizan con pan duro a remojo, como las manchegas, y se les añade longaniza de Graus, tocino fresco, cebolla, ajo, pimentos dulce, sal y sebo de cerdo.
Las migas andaluzas: Llevan pan duro , como las anteriores, aceite de oliva, ajos, matalauva. También las puedes acompañar con pepino, aceitunas o rábano.
Las migas murcianas o gachasmigas: No se preparan con pan a remojo, sino que se realizan directamente con agua y harina en la sartén. Suelen ir acompañadas de ñoras (pimiento seco), salchicha, tocino, longaniza, cebolla, aceituna o uva, naranja o granadas.
Las migas de Almería: Se hacen con sémola o trigo y se comen con sardinas, boquerones, bacalao berenjenas fritas, pimientos secos y fritos, tomate secos o fritos, “tajás” (trocitos de lomo o tocino), morcilla y chorizo. También las puedes degustar acompañadas de granadas, uvas, habas, rábanos, olivas, ajos tiernos.
Las migas extremeñas: Se realizan con pan a remojo y frito, como las andaluzas y manchegas. Se les añade tocino, chorizo, pimientos, sardinas…
Como habrás visto, hay un denominador común: una base de pan, pan con harina o harina y agua con la que se hacen las migas que luego se acompañan con un sinfín de alimentos añadidos , ya sean salados o dulces, para convertir el plato en una delicia para los días de lluvia.
Y, cómo no, algún día te puedes dar el lujo de tomarte un rico chocolate caliente. Pero si ya estás con la “operación bikini”, mejor que sea una rica infusión, como te recomendábamos en el artículo ¿Cómo se prepara bien una infusión? O en Mejora tu salud en invierno con infusiones. ¡Feliz día lluvioso!