La sexta ola no se ha conformado con una explosión de nuevos contagios, sino que son miles los reinfectados. Era una evidencia que sufrían muchas personas, que se creían a salvo tras superar el covid en meses anteriores, ahora está confirmado por los expertos que hablan de un riesgo de reinfección es cinco veces mayor con la variante Ómicron.
Varios estudios tanto nacionales como extranjeros explican la rápida expansión de ómicron. La inmunidad que genera de forma natural el sistema inmunológico tras una infección de Ómicron es sensiblemente más baja que la que se conseguía tras un contagio con la variante delta. Según un estudio del Imperial College de Londres esta capacidad de protección natural es de apenas un 19% con ómicron, por lo que cada vez son más las personas que vuelven a reinfectarse.
Para tener una idea de lo que implican estos datos, basta saber que la protección generada de forma natural por nuestro sistema inmune tras sufrir el contagio por la variante delta alcanzaba el 85% durante los seis meses posteriores al contagio. Es decir, que el riesgo de reinfección es hasta 5,4 veces mayor con Ómicron.
En los últimos quince días se han registrado más de 20.000 reinfecciones. El 55% de las que ha habido durante toda la pandemia. Es el efecto de Omicron, pero contrarrestado por la vacuna, que proporciona una protección de sufrir la enfermedad grave. La mayoría de los reinfectados son personas menores de 50 años y pueden o no estar vacunados.
Los datos sanitarios de Cataluña informaban la semana pasada que el 2% de sus positivos desde el comienzo de la pandemia eran reinfecciones, un porcentaje que ha incrementado tras la irrupción de ómicron hasta el 5% (entre los afectados mayores de 50 años) y el 8% (entre los menores de 50).
El riesgo de reinfección es casi igual con la administración de dos dosis de la vacuna covid, que apenas proporcionan una protección del 20% frente a una reinfección por Ómicron, según los investigadores británicos que no obstanten subryan la importancia de la dosis de recuerdo o tercera dosis de la vacuna, que según sus estimaciones incrementaría la tasa entre el 55 y el 80%.