El Yoyas, que continúa en busca y captura, defiende su inocencia: "No he hecho nada en mi vida"

  • Carlos Navarro, conocido como el Yoyas, permanece en búsqueda y captura desde el 28 de noviembre

  • El exconcursante del programa de televisión Gran Hermano ha reaparecido para defender su inocencia

  • “No he hecho nada en mi vida para merecerme esto", ha dicho Carlos Navarro

Carlos Navarro, conocido como el Yoyas, permanece en búsqueda y captura desde el 28 de noviembre. No obstante, el exconcursante del programa de televisión Gran Hermano ha reaparecido en una entrevista para el diario El Mundo para defender su inocencia.

“No he hecho nada en mi vida para merecerme esto", ha defendido en la entrevista para la que se citó en medio de un bosque perdido con una camiseta con un mensaje contra la ley de violencia de género, que considera “injusta e inconstitucional”: “A los hombres nos mata civilmente como padres”.

"Estoy condenado a casi seis años de prisión por cuatro delitos sin fecha ni lugar determinado y con un relato falso", asevera en la entrevista.

El Yoyas, en búsqueda y captura

El Juzgado de lo Penal Número 5 de Las Palmas de Gran Canaria dictó un auto en el que decreta la búsqueda y captura de Carlos Navarro para su ingreso inmediato en prisión tras desatender el requerimiento del Juzgado de paz de Vilanova del Camí de 14 de noviembre para ingresar voluntariamente.

Yoyas fue condenado en sentencia firme por el Juzgado de lo Penal Número 5 de Las Palmas de Gran Canaria, como autor responsable de un delito de maltrato habitual, cuatro delitos de lesiones, un delito leve de amenazas y un delito leve de vejaciones, a las penas de casi seis años de prisión, entre otras. La Audiencia de Las Palmas confirmó la sentencia.

Seis de estos delitos fueron consumados en la persona de su exmujer Fayna Bethencourt y de sus dos hijos (ambos menores de edad), así como un séptimo perpetrado contra la pareja de su exmujer.

A pesar de ello, en la entrevista, el Yoyas afirma que lo que más le “duele” es perder a sus hijos: “Es la mayor condena que me ha podido pasar, ese amor que me han privado de darles y de recibir".