Toda la clase de Paco, niño con discapacidad, se sube a la silla de ruedas para jugar con él al baloncesto

Paco tiene 8 años y va en silla de ruedas por una enfermedad rara. Sufre una Atrofia Muscular Espinal (AME), enfermedad neurodegenerativa que le obliga a tener que moverse con ella. Le encanta el baloncesto, pero apenas podía encontrar amigos con lo que practicarlo, algo a lo que han puesto remedio entre todos, porque toda su clase se ha unido precisamente para ayudarle y que nunca tenga que jugar solo.

Desde su colegio, el CEIP Tomás de Villaroya de Valencia, con su padre a la cabeza, en una bonita acción conjunta han creado una nueva actividad extraescolar a la que no han tardado en apuntarse los compañeros de Paco: baloncesto adaptado.

El éxito de la iniciativa ha sido rotundo, y gracias a ella el pequeño puede demostrar que se maneja como nadie en eso de encestar en la canasta.

Paco cumple un sueño con el baloncesto adaptado: "Lo mejor es que conocemos más amigos"

Ahora, muchos de los niños están deseando que toque el timbre para que llegue la esperada hora de la actividad extraescolar: “Lo mejor es que conocemos más amigos”, dice el propio Paco.

Hoy, con toda la clase subida a la silla de ruedas, han hecho “una buena piña” en la que se divierten al tiempo en que practican deporte de forma inclusiva.

“Sin dudarlo se apuntaron”. “A la misma altura y en las mismas condiciones”, cuentan las madres de algunos de los pequeños que participan.

Juegan en el Club de Baloncesto Petraher, que ha ayudado al padre de Paco, David, a hacer todo posible y conseguir sillas de ruedas para los niños. Entre los integrantes del equipo también están las pequeñas Irene o Laia, quien tiene autismo y de este modo también “se relaciona con los demás”, como expone su padre.

“Está superguay”, subrayan los niños esbozando una sonrisa.

"Niños con y sin discapacidad", unidos para jugar al baloncesto

“Niños con y sin discapacidad se juntan, juegan al baloncesto y no miran una discapacidad”, explica José Ferri, entrenador de baloncesto, mientras en la misma línea David señala: “No puede ser que haya niños por un lado y otros niños por otro. Deporte para todos”.

Ahora, tras cada partido, los niños permanecen con las mismas ganas de volver a disfrutar juntos en el siguiente.