El Papa dice que las homilías "son un desastre en general": reclama que no duren más de 8 ó 10 minutos

El Papa ha pedido que se mejoren las homilías que, según él, a menudo son un "desastre" y ha especificado que no deberían durar más de 8 ó 10 minutos. "Se prepara en oración, se prepara con espíritu apostólico. Por favor, las homilías, que son un desastre en general", ha asegurado el Pontífice al recibir en el Vaticano a los participantes al curso para responsables diocesanos de celebraciones litúrgicas. Por otra parte, Francisco llamó a "seguir las huellas" de Benedicto XVI durante el funeral celebrado en la plaza de San Pedro.

En su discurso a los participantes en el curso 'Vivir en plenitud la acción litúrgica', del Pontificio Instituto San Anselmo, dirigido a los responsables diocesanos de las celebraciones litúrgicas, Francisco se ha hecho eco además del documento de trabajo del Sínodo sobre la Sinodalidad, que celebrará su cita final en el Vaticano en ocupar del 2024, según el cual "la calidad de las homilías se considera casi unánimemente un problema".

Francisco: "La homilía no es una conferencia"

Para el Pontífice, la liturgia "es el arte primario de la Iglesia, el que la constituye y caracteriza". Por ello, ha instado a cuidar de las celebraciones con "preparación y compromiso", además de un "profundo conocimiento y un profundo sentido pastoral".

Jorge Mario Bergoglio ha hecho hincapié de este modo en que la Iglesia, a su juicio, "no acaba de entender": "La homilía no es una conferencia, es un sacramental". Así, ha abogado por ayudar a las "comunidades a vivir la liturgia" y a "dejarse plasmar por ella".

El Papa también ha recibido este sábado a la comunidad del Pontificio Colegio Urbano de Propaganda Fidei con motivo del 400 aniversario de su fundación. Una institución que fue fundada por el papa Urbano VIII para la formación del clero destinado a territorios de misión.

"Fue una intuición importante, que hoy conserva su validez", ha asegurado Francisco, que ha llamado a los nuevos sacerdotes a acoger e interpretar "creativamente" la realidad dejándose "interpelar por las múltiples necesidades e interrogantes del tiempo" presente.