Detienen en Barcelona a un “peligroso pederasta” que agredió sexualmente a niños de entre 3 y 10 años

La Policía Nacional ha detenido en Sant Pere de Ribes, Barcelona, a un “peligroso pederasta” que agredió sexualmente a niños de su entorno más cercano, grabando los hechos y publicándolos posteriormente en foros de la llamada ‘Dark Web’. El caso, que se conoce justo una semana después de que supiésemos que una madre llegó a infiltrarse en un grupo de pederastas para salvar a su hija captada en Gandía, permanece abierto: hay seis víctimas identificadas y no se descartan más.

La detención, concretamente, se efectuó el miércoles 11 de enero, decretándose su ingreso en prisión provisional dos días más tarde, según ha informado el cuerpo policial.

El presunto pederasta llevaba desde 2016 grabando con el móvil las agresiones sexuales, siempre ocultando su rostro y adoptando “fuertes medidas de seguridad para no ser descubierto” tras subir los hechos a la Red.

La policía de Queensland, en Australia, fue la primera en detectar al pederasta

Fue la policía de Queensland, en Australia, la que detectó en primer lugar los vídeos que estaba subiendo a la red, alertando a las autoridades españolas a través de la Interpol. Tras ello, se inició una investigación que ha identificado ya a al menos seis víctimas, con edades comprendidas entre los 3 y 10 años, y todos ellos niños del entorno del detenido, en ocasiones por amistad con sus padres.

El detenido fue monitor de menores en diferentes clubes de fútbol de la zona

El pederasta fue además monitor de menores en diferentes clubes de fútbol de la zona, por lo que la investigación sigue abierta y no se descarta que puedan aparecer nuevas víctimas. Además, durante el registro de su vivienda, los agentes incautaron cuatro discos duros, tres tarjetas de memoria, un teléfono móvil y una cámara de acción, encontrando también "mucha pornografía infantil poco conocida" y descargada de la 'Dark Web'.

Una fotografía fue clave para terminar de descubrir al pederasta

Para llegar a su detención y obtener su identidad, los agentes de la Policía Nacional han empleado técnicas de reconocimiento de imagen y de inteligencia policial: el análisis de las grabaciones acreditó que estaban grabadas en España y el estudio de cómo se expresaba el investigado y de los rasgos parciales confirmó que era una persona sospechosa y que podía estar teniendo contacto con menores en la actualidad. De este modo, y, a través de una fotografía en la que aparecía parcialmente el exterior a través de una ventana, determinaron que se había grabado en el partido judicial de Vilanova i la Geltrú, en Barcelona.