El duro relato de Irene: "Fui abusada sexualmente por mi padre desde que tengo uso de memoria hasta los 14 años"
Irene, una joven de 20 años, fue abusada por su padre desde que tenía uso de razón hasta que tenía 14 años: el hombre quedó "absuelto"
La Policía Nacional detiene a un padre por varias agresiones sexuales a su hijo adolescente en Mallorca
Las víctimas de agresión sexual, además de vivir una auténtica pesadilla, tienen que afrontar un largo y duro camino de recuperación que no siempre es completa. Muchas veces, esas agresiones se producen en su entorno más próximo, lo que dificulta aún más el proceso.
Conocemos la historia de Irene Monserrat, víctima de abuso infantil, en una entrevista con Lorelei Esteban: "Tengo 20 años y fui abusada desde que tengo uso de memoria hasta los 14 años por parte de mi padre". La joven estuvo nueve años guardando un secreto impuesto que le condicionó la vida.
"Era muy constante en el hecho de 'no se lo digas a nadie', 'esto es un secreto' y echarme mucho la culpa de que yo lo buscaba y yo lo quería", explica la joven sobre el comportamiento de su progenitor. "Yo, mi abuso, no sabía que era un abuso hasta que era más grande, porque para mí era algo normal. Estaba tranquilamente en mi habitación y, de repente, llegaba mi padre con una película y me tocaba", detalla sobre la dura experiencia que sufrió.
Los abusos se intensificaron cuando sus padres se separaron
Cuando Irene tenía nueve años, sus padres se separaron y el abuso entonces se intensificó. "Hasta 1º de ESO no se lo conté a nadie porque tenía mucho miedo. Solo me quería morir", cuenta la joven.
La culpa y el rechazo hacia sí misma la persiguieron durante años: "Yo no sentía odio hacia mi padre. Yo sentía odio hacia mí. Yo sentía que lo había hecho todo mal, que yo lo había buscado y había creado la situación". La última vez que escuchó a su padre fue en un juicio tras un biombo y "quedó absuelto con unas razonables". "Me da pánico salir de casa, ahora ya no hay nada que me proteja", lamenta Irene.
Irene encontró la salida en una fundación de Barcelona
En la Fundación Concepció Juvanteny, con sede en Ripollet (Barcelona), Irene encontró la salida. "No hablamos del tratamiento, hablamos de reparación, y todo acompañada de todo el nucleofamiliar que pueda, excepto el agresor", explica la directora del centro, Montse Juvanteny.
"¿Es difícil denunciar? Sí. Una vez denuncies va a ser un proceso muy duro y difícil, pero vale la pena después del tiempo", sentencia la joven. Hablamos de una terapia pionera en España que está siendo luz para muchos niños.