La Policía libera en una discoteca de Gran Canaria a 27 menores a los que encerraron en una habitación para evitar ser sancionados
El dueño del local y varios empleados se enfrenta a cargos por un presunto delito de detención ilegal, además de una multa por permitir la entrada de menores
Uno de los menores a los que encerraron en un altillo en la discoteca New One durante la redada policial pudo avisar a sus padres para que los liberaran
La Policía Nacional ha liberado a 27 menores, que se encontraban encerrados en contra de su voluntad en el altillo de una discoteca de Gran Canaria. Los responsables del local los encerraron en la habitación, en la madrugada del domingo, para evitar que los agentes les descubrieran y los sancionaran por permitir el acceso de menores. Ahora, la situación del empresario podría ser peor al enfrentarse a cargos por un presunto delito de detención ilegal, además de la multa por permitir la entrada de menores al local de ocio nocturno en la Playa del Inglés.
Los responsables de la discoteca New One les pidieron a los chicos que guardaran silencio y que apagaran los móviles antes de meterlos en el altillo del local, un pequeño espacio sin apenas ventilación. Una de las menores, asustada por el encierro, no hizo caso y llamó a su padre, que es policía, avisándoles de dónde estaba ella y el resto de los jóvenes, que pasaban sus vacaciones en Gran Canaria.
Una menor, asustada, avisó a su padre, que es policía y este alertó a los agentes de lo que estaba ocurriendo
La retención de los jóvenes fue descubierta este domingo, sobre las 3 de la madrugada, durante un operativo de la Policía Nacional para detectar trabajadores extranjeros sin contrato legal, pero este padre acudió a la discoteca y avisó a los agentes, que finalmente registraron el altillo, donde estaban los menores, retenidos bajo llave por varios empleados, que les impedían salir, según la web de Canarias7.
La Policía, después de sacarlos del lugar, donde estaban encerrados, les proporcionó agua y los identificó, localizando a los progenitores de los 27 jóvenes. El propietario de la discoteca, ubicada en un supermercado en la playa del Inglés, al sur de Gran Canaria, está siendo investigado por supuesto delito de detención ilegal; varios de los empleados, entre ellos los porteros, también estarían implicados en el asunto.