Abusan sexualmente de una nonagenaria en una residencia de ancianos de Gran Bretaña

  • La señora, que estaba atada a la cama en contra de su voluntad, no pudo defenderse

  • Tras una larga temporada en el hospital para recuperarse, ahora vive en otra residencia

Una familia británica ha publicado en redes sociales unas desgarradoras imágenes en las que se puede ver a una mujer de 90 años después de que supuestamente fuese agredida sexualmente y golpeada por otro residente en un hogar de ancianos. Los hechos habrían ocurrido en noviembre del año pasado.

La familia de esta abuela nonagenaria ha dado a conocer la situación para crear conciencia después de que los familiares de otra anciana acusaran al mismo centro de una situación de abandono. Las impactantes imágenes muestran a la frágil víctima con un gran hematoma en el lado derecho de la cara, con varios moratones en su brazo y con un corte visible en la cabeza.

El familiar, que trabaja en el mantenimiento de la residencia, compartió las horribles fotos y denunció que "hace casi doce meses, otro residente la agredió sexualmente y la golpeó mientras la cuidaba". La señora, que estaba atada a la cama en contra de su voluntad, no pudo defenderse.

La superviviente abuela ha sido trasladada a otra residencia de ancianos después de pasar una prolongada estancia en el hospital para poder recuperarse de las lesiones. La víctima se ha quedado con trastorno de estrés postraumático, ya no confía en los enfermeros y necesita unos tres o cuatro profesionales para tratar con ella.

A pesar de que se está llevando a cabo una investigación policial conjunta sobre la acusación, no hay ningún procedimiento abierto contra el presunto agresor puesto que tiene deterioradas sus facultades mentales. Eso sí, el sistema de cámaras de videovigilancia capturó su denigrante comportamiento.

Los familiares de la víctima exigen "una disculpa pública" de los responsables del hogar de ancianos, especialmente por "tener que pagar tarifas exorbitantes creyendo que ella estaría recibiendo la mejor atención".

Este año, tras el confinamiento provocado por la pandemia de coronavirus, otra mujer también señaló que su abuela tenía moratones. Añadió que las familias "deben seguir controlando" a sus mayores y pidiendo fotos al centro para asegurarse de que sus seres queridos están a salvo.