La avioneta acababa de despegar del aeródromo de Son Bonet, situado a tan sólo 300 metros del lugar donde se ha estrellado. El aparato ha caído en un descampado y se ha incendiado. Los fallecidos son dos hombres y una mujer mientras que el piloto ha resultado herido y ha sido trasladado al hospital en Estado grave. El vuelo era de los llamados de ocio. Se realizan a diario y son paseos aéreos para disfrutar de la isla desde el aire. La empresa que gestiona esto vuelos asegura que la avioneta ha pasado todas la revisiones. La Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación que determinará las causas del siniestro.