La ausencia del ruido humano atrae a ballenas y delfines hasta las costas españolas

  • El confinamiento causa un cambio en los cetáceos

Estos tiempos tan insólitos que vivimos, tienen a muchas especies animales, lógicamente, absolutamente descolocadas. Las playas desiertas, el escaso tráfico marítimo, esta ocasionando que delfines e incluso ballenas se estén acercando como no lo han hecho nunca a nuestras costas.

Como si se sintiese observada, una ballena rorcual juguetea frente a la costa de les Columbretes. Lo mismo que este otro grupo de rorcuales, cruza el Estrecho muy cerca de la costa de Gibraltar. Y es cerca de allí donde se está haciendo habitual la imagen: delfines que no tienen ningún pudor en acercarse hasta la orilla desde que no es territorio hostil.

Lo hacen, porque ya no escuchan nuestro ruido. Tanto que son los propios aficionados los que graban estas imágenes. Vídeos que luego servirán de estudio para relacionar nuestro aislamiento con el comportamiento de los cetáceos. Tal vez esa sea nuestra mayor lección desde que no ocupamos los mares.

Piden autorizar la caza

Con las calles vacías los que han perdido también el miedo a salir son los jabalíes. Bajan a los pueblos y están arrasando muchos cultivos. Los agricultores están muy preocupados porque peligra ya la temporada de cerezas. Varios ayuntamientos piden que se autorice la caza controlada de estos animales mientas dure el confinamiento.