Fue la abuela materna quien avisó a las autoridades, tras hallar los cuerpos sin vida del matrimonio y sus dos hijas. La Guardia Civil encontró los cuerpos de la mujer y las dos niñas, abrazadas entre ellas sobre una cama de matrimonio, mientras que el cuerpo del Israel se encontraba en otra habitación, pendido de una cuerda.
El informe preliminar de la autopsia ha revelado que el padre de la familia mató a Paula estrangulándola con un lazo. Seguidamente asfixió a sus dos hijas cubriéndoles nariz y boca y dejó los cuerpos cuidadosamente colocados, una escena estudiada.
Israel, mecánico de helicópteros del Ejército de Tierra, también acabó con la vida del perro, que fue encontrado a la cama en la que yacían los restos mortales de las tres víctimas. Aún se están analizando las muestras remitidas a Toxicología que determinarán si Israel pudo suministrarles algún tipo de fármaco.
El presunto autor de los hechos escribió a mano una carta confesando su autoría, y aseguraba que el matrimonio tenía problemas económicos, culpaba a la familia de su mujer por no haberles ayudado y expresaba su deseo de que sepultasen a los cuatro en un mismo nicho. El hombre se suicidó ahorcándose del techo con una cuerda y con las manos atadas a unas garrafas.