El hielo del océano Ártico podría desaparecer en 2015

Informativos Telecinco 15/12/2013 11:42

Los efectos del calentamiento global siguen siendo uno de los principales focos de preocupación de los especialistas, quienes continúan insistiendo en la necesidad de concienciar a la población de las consecuencias devastadoras que éste tiene para el medio ambiente.

La última información al respecto que ha anunciado Peter Wedhams, profesor de física oceánica de la Universidad de Cambridge en el Reino Unido, apunta a que el océano Ártico tal y como lo conocemos podría quedarse sin hielo en el verano de 2015.

Según el profesor, –quien ha realizado cuarenta expediciones polares analizando pormenorizadamente la zona desde su primera incursión en 1969–, este océano del extremo norte del planeta se está calentando a una velocidad dos veces superior a la que lo hacen otras zonas de la Tierra próximas al ecuador. Así, apunta que en 2007 se produjo un descenso en la superficie de hielo del lugar equivalente casi a la mitad de su extensión habitual, lo cual motivó la aparición de "un océano de aguas abiertas en la parte superior del planeta" en lo que define como "un efecto sin precedentes", tal y como recoge RT.

Más allá, después de realizar un estudio que requería el empleo de submarinos nucleares británicos para por medio de un sónar estimar desde debajo de la superficie de hielo su grosor, concluyó que ya entre los años 1970 y 2000 éste se había reducido hasta en un 43%.

Por ello, advierte ahora la necesidad de preservar el medio ambiente antes de que sea algo imposible debido al abrupto aumento de las temperaturas, disparadas por la enorme tasa de emisión de gases que permanecen durante un tiempo muy prolongado en la atmósfera.

De lo contrario, la secuencia de efectos en cadena que desatará este fenómeno, más allá de imponer un clima mucho más extremo y aumentar también el nivel del mar, alterará multitud de ecosistemas y cadenas alimentarias que derivará en la extinción de animales que ya están amenazados como el oso polar, la ballena beluga, el pingüino emperador o el reno.

Aunque existe una parte del sector científico y sus investigaciones que aseguran que el efecto del calentamiento global se hará visible en un futuro no tan cercano, dando mayores plazos, lo cierto es que sí coinciden en que es algo que hay que abordar cuanto antes.