El joven de 20 años, sin antecedentes, apuñaló presuntamente a uno de los hijos de Paco en la cabeza y, cuando iba a asestarle la segunda puñalada, su padre lo protegió y recibió el golpe mortal. El cuñado de Paco también acabó golpeado con un palo durante la discusión que se inició cuando paseaban a los perros.
La defensa de ‘El Chule’ ha insistido en la colaboración que ha mostrado su cliente. Ha respondido a todas las preguntas y le ha explicado a la juez que tardó en entregarse porque tenía miedo pero que finalmente lo hizo porque quiere que vuelva la normalidad al barrio. El joven se ha mostrado arrepentido y ha pedido perdón, explicaba la letrada, y ha asegurado que la familia de ‘El Chule’ hablará con los familiares de Paco.
Agobiado por la presión policial, Jesús se entregaba en una comisaría acompañado por una abogada y arropado por su familia. Su padre iba con él. Durante diez días padre e hijo habían cambiado de casa, durmiendo cada día en un sitio para que no les encontraran. Huyeron del barrio sin apenas equipaje. La casa por recoger. Los vecinos la llenaron de pintadas de asesinos, quemaron uno de los vehículos y destrozaron otros.
El barrio entero salió a la calle presionando para que todos los miembros del clan Los Visita fueran expulsados. El patriarca negoció con la policía y con los vecinos; Jesús, se entregaría cuando acabaran los disturbios. Hoy en los juzgados familiares del clan reivindicaban su derecho a permanecer en sus casas.
Hay niños que van al colegio, familias que llevan años viviendo de la venta de fruta y verdura en los mercadillos. No tienen que sufrir tanto acoso para que se marchen. Aunque el patriarca ha prometido que las dos familias implicadas en la reyerta ya no regresarán a sus viviendas, ellos dicen que no se irán. Sin embargo hay una negociación para buscarles otras viviendas y realojarlos fuera del barrio.