Cómo reconocer a la araña violinista, la especie que está provocando el pánico en España

  • El veneno de este arácnido puede ser más tóxico que el de una cobra

  • Sólo ataca si se siente amenazada y no tiene alternativa

  • Puede medir hasta 20 milímetros y tiene tres pares de ojos

La araña violinista o de rincón es originaria de Sudamérica pero está perfectamente adaptada al clima mediterráneo. A España. podría llegar transportada por algún coleccionista o en un contenedor de mercancías. Pese a que puede ser letal, lo cierto es que no es fácil encontrarse con una y también es raro sufrir su picadura, pues se trata de un ejemplar poco agresivo que prefiere ocultarse en grietas y rincones y sólo ataca si no encuentra otra alternativa.

La araña violinista puede medir hasta 20 milímetros y su nombre proviene de la mancha que posee en el lado dorsal del tórax, muy similar a la forma de un violín. Es de color negro, pardo o ceniza, dependiendo del hábitat en el que se encuentre, y tiene tres pares de ojos, dos menos de los habituales en los arácnidos. Sus telarañas son pegajosas y de color blanquecino. Difícilmente se verán colgadas de árboles o paredes.

Esta especie es principalmente nocturna, y permanece especialmente activa en las noches calurosas de verano, mientras que por el día se oculta en rincones oscuros y lugares polvorientos, como librerías, armarios o la parte trasera de los cuadros. Cuando es sorprendida, reacciona con mucha rapidez y puede correr velozmente en busca de refugio, escabulléndose por diminutas rendijas e incluso llegando a saltar 10 centímetros de altura.

Cómo actuar si se sufre una picadura

Por mucho que habitualmente solo ataque cuando se siente amenazada, su veneno es 15 veces más tóxico que el de una cobra, y diez veces más que el ácido sulfúrico, aunque no afecta de la misma forma a todo el mundo. En caso de sufrir su picadura, lo más recomendable es acudir con urgencia al hospital. Inmediatamente surge una sensación punzante seguida de un fuerte dolor e hinchazón en la zona. Es importante actuar con rapidez para evitar que el veneno se extienda. Se recomienda poner una bolsa de hielo sobre la picadura y mantenerse en reposo, además de mantener la herida limpia y evitar rascarse en la zona afectada.