Si comes y conduces puedes ser multado con hasta 600 dólares en Australia

  • Consideran que pierden parte de su atención en la carretera

Comer o beber al volante son práticas que pueden alterar la propia libertad de movimientos, el campo necesario de visión y la atención permanente a la conducción. Por este motivo, la compañía de seguros más grande de Australia, NRMA, ha emitido una advertencia a todos los conductores de Nueva Gales. No pueden comer y conducir al mismo tiempo o serán multados con hasta 600 dólares.

A pesar de que no hay una ley que lo establezca la compañía advierte de que pueden llegar a trámite si comen y beben mientras conducen. La Regla de carretera 297 (1) establece que "un conductor no debe conducir un vehículo a menos que el conductor tenga el control adecuado del vehículo".

Si comer mientras conduce interfiere con el control del vehículo por parte del conductor, el conductor puede estar cometiendo un delito dependiendo de las circunstancias. En Nueva Gales del Sur en zonas escolares, la multa es de 541 dólares con 4 puntos de demérito. En WA la multa es de 600 dólares y en el Territorio del Norte es de 500 dólares. La pena más baja por el delito está en Tasmania con 163 dólares.

En España también está sancionado

Realizar esta acción en nuestro país también se considera una distracción, que se castiga con una multa leve de hasta 100 euros, sin retirada de puntos. Si el conductor necesita beber o comer cualquier cosa durante un largo viaje, se recomienda parar en una estación de servicio para ingerir cualquier alimento, evitando así cualquier distracción en la carretera que pueda originar un accidente.

Otras de las sanciones con multa leve son: manipular algún aparato reproductor de música o GPS; fumar; no mirar la carretera; llevar música demasiado alta, entre otras.