El día de su desaparición, Nuria Escalante, de 52 años, estuvo en Cáritas de Ibiza. Allí solía acudir a ducharse, usar la lavandería y desayunar. Ese día coincidió con unos de los investigados por su desaparición. No habló con él pero las imágenes de las cámaras de seguridad muestran cómo el hombre la mira y observa detenidamente cuando ella pasa por delante. “La mira atentamente y de forma detenida”, consta en las diligencias de la Guardia Civil, según ha publicado el Diario Información.
Los investigadores están revisando más de 100 vídeos captados por distintas cámaras en los que sale Escalante el día de su desaparición, según ha podido saber Informativos Telecinco.
Las imágenes son claves para la Guardia Civil. De hecho, el único de los cinco investigados en este caso que permanece en prisión sale en uno de esos vídeos. Al principal sospechoso se le ve andando por la calle con la mujer hasta que empieza a llover y se refugian en la parte trasera de un hotel de la isla.
Una hora después éste hombre aparece solo. Se le ve ir y venir por la zona varias veces. Una de ellas lleva un carro con un bulto dentro. El hijo de Nuria lo tiene claro: “No puede ser otra cosa. Tiene que ser ella seguro”. El sospechoso declaró que llevaba el motor de un barco que robó días antes.
Lo cierto es que han pasado cuatro meses desde que Escalante desapareció y no hay rastro de ella.