Un vecino de Oviedo se personó el pasado viernes en la Oficina de Denuncias de la Jefatura Superior de Policía en la ciudad asturiana para entregar 100 euros. El hombre se había encontrado el dinero en la boquilla del dispensador de billetes de un cajero automático, que un cliente había olvidado momentos antes.
El Grupo de Delitos Tecnológicos de la Brigada Provincial de Policía Judicial contactaron con la entidad bancaria propietaria del cajero automático con el fin de identificar a la persona que había olvidado el dinero.
Una vez identificada la clienta, se procedió a su citación para hacerle entrega del dinero olvidado, mostrándose muy agradecida a la Policía Nacional y especialmente a la persona que honradamente recogió y entregó el dinero. La mujer justificó este olvido a las prisas y al hecho de que habitualmente opera con la libreta bancaria y no con la tarjeta que tiene un funcionamiento diferente a la cartilla, ya que la expulsa antes que el dinero.
La Policía recuerda que en casos como éste, en los que queda olvidado en el cajero automático el dinero o la propia tarjeta, el propio funcionamiento del los cajeros transcurrido un corto espacio tiempo se "traga" el dinero o la tarjeta, sin restar dicho saldo de la cuenta y pudiendo el usuario dirigirse a la oficina bancaria para recuperar la tarjeta y solventar este tipo de incidencias.
Por otro lado, este domingo, operarios de Renfe hicieron entrega en las dependencias de la Brigada Móvil de la Jefatura Superior de un bolso que apareció abandonado en un tren de cercanías.
En el interior del mismo entre otros efectos personales se encontraba una cartera con aproximadamente ochocientos euros, un teléfono móvil y dos billetes de lotería. Los agentes trataron de localizar a la propietaria, quien finalmente fue encontrada en un tren con destino a Barcelona. Los efectos fueron devueltos a una persona de su confianza.