Los beneficios de la gimnasia hipopresiva

Esperanza Buitrago 24/09/2018 10:40

La gimnasia hipopresiva es un método de entrenamiento que combina posturas para que la zona abdominal tenga menos presión combinando el ejercicio con la respiración. Los ejercicios se hacen en apnea y, a veces, soltando el aire.

Los abdominales hipopresivos se pusieron de moda entre mujeres que acaban de dar a luz para fortalecer el suelo pélvico y tonificar el abdomen. Sin embargo, Anabel Mena, fisioterapeuta, asegura que es un método indicado para “cualquier persona que quiera hacer una corrección postural”. Sirve para pacientes con problemas de columna o incluso esclerosis pero también a quien trabaja muchas horas delante del ordenador y para prevenir problemas posturales. Atletas que buscan mejorar su rendimiento y hombres que han superado un cáncer de próstata están entre sus pacientes. Según un estudio de la brasileña Universidade Federal de Uberlandia, el 74% de las personas que hacen correctamente los abdominales hipopresivos obtienen resultados sorprendentes.

Otras ventajas más allá de mejorar la figura

La fisioterapeuta asegura que la gimnasia hipopresiva tiene muchos beneficios más allá de la reducción del perímetro de la cintura y la tonificación de la pelvis y el trasverso del abdomen. Destaca como fundamental “la corrección postural y el retorno venoso”, es decir, sirve para tratar la “retención de líquido, activar la circulación y mejorar la capacidad respiratoria”.

Muchas mujeres tras el parto optan por este tipo de entrenamiento pensando en tonificar la tripita tras dar a luz y es que el método es ideal para fortalecer la musculatura del abdomen, según los expertos. También ayuda a fortalecer el suelo pélvico, muy recomendado tras un parto pero también para mujeres que sufren dolor menstrual o durante las relaciones sexuales y de incontinencia, señala Mena.

Este método solo está contraindicado para personas hipertensas y mujeres embarazadas. En cualquier caso, para practicar esta actividad es recomendable hacerlo siempre previa valoración individual del paciente por un profesional cualificado.