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La borrasca Gloria, una de las más mortíferas que se recuerdan y que afectó a la península el pasado mes de enero, podría haber facilitado pistas sobre el paradero de personas desaparecidas.
El paso de este temporal dejó 13 víctimas mortales y destrozos millonarios, sobre todo, en la cornisa mediterránea. Aunque también devolvió a las costas restos humanos.
Tal y como publica El Punt Avui y recoge el diario 'El Caso', los familiares de Martos Borrayo, un vecino de Santa Coloma de Cervelló, Barcelona, desaparecido el 4 de noviembre del 2017 en el municipio de Guixers (Lleida), decidieron volver a inspeccionar la zona después de las lluvias. Allí descubrieron que Gloria había devuelto a la arena un cráneo humano.
Los familiares de Borrayo creen que puede pertenecer al desaparecido, aunque para averiguarlo tendrán que esperar a los resultados de las pruebas de ADN, lo cuales pueden tardar en resolverse varios meses.
En Masquefa, Barcelona, se han encontrado restos humanos que podrían pertenecer a Liberto, un vecino de la localidad, de 82 años, que desapareció el pasado 8 de septiembre de 2019 en Sant Esteve Sesrovires.
Un tercer caso también está en estudio. Se trata de unos restos encontrados que podrían ser los de Óscar, un hombre desaparecido en Santa Coloma de Gramenet (Barcelona) en julio del 2018.
Gloria dejó también en Montcada i Reixac (Barcelona) los restos de una mandíbula humana, que un vecino de Sant Carles de la Ràpita (Tarragona) encontró en la playa del Trabucador, en el delta del Ebro. Y no solo en tierra. La borrasca removió el fondo del mar. Frente al puerto de Barcelona, apareció el cadáver de un hombre con un traje de neopreno y en avanzado estado de descomposición. Fue encontrado por unos pescadores. Las prueba de ADN determinarán sus identidades.
El mismo temporal también dejó cuatro desaparecidos, los cuales todavía no se han localizado.