Un muerto en el Guadalquivir: un hombre de 33 años pierde la vida al estrellarse su moto de agua con una angulera

  • El fallecido tiene antecedentes por narcotráfico, tenencia ilícita de armas y violencia de género

  • Un familiar navegaba con otra moto de agua en paralelo

Diez de la noche del viernes, en las proximidades del embarcadero de La Señuela, uno de los muchos que jalonan el Guadalquivir en su camino desde Sevilla hacia el mar. Dos motos de agua con dos vecinos de Lebrija, navegan por el rio en esa zona, próxima a la localidad sevillana. Uno de ellos es un hombre de 33 años, con antecedentes por narcotráfico, tenencia ilícita de armas y violencia de género. Junto a él, navega un familiar.

De repente el accidente. El rio está plagado de anguleras, embarcaciones ilegales dedicadas a la captura de angula, y muchas otras veces a esconder alijos de hachís. Son embarcaciones de pequeño tamaño pero que portan en su laterales barras de hierro de hasta cuatro metros de las que cuelgan las redes. Contra uno de ellas se estrella la cabeza del hombre de 33 años, que fallece.

Son embarcaciones de pequeño tamaño pero que portan en su laterales barras de hierro de hasta cuatro metros de las que cuelgan las redes. Contra uno de ellas se estrella la cabeza del hombre de 33 años, que fallece en el acto

El familiar que le acompaña, del que no consta ninguna llamada a los servicios de emergencia, recupera el cuerpo e intenta trasladarlo en su moto de agua, pero le es imposible. Finalmente una embarcación debe acudir a la zona para recogerlo. En torno a las cuatro de la mañana se procede al levantamiento del cadáver, y a su traslado al Instituto de Medicina Legal, donde se le practicará la autopsia.

La Guardia Civil de Sevilla investiga en estos momentos lo sucedido. Las anguleras, contra las que el Instituto Armado ha realizado numerosas operaciones siguen siendo, señalan fuentes del mismo, un tremendo problema, como demuestra este caso, para la seguridad en el Guadalquivir.