La investigación sobre el asesinato de Isabel Carrasco avanza paso a paso. El dado este miércoles ha tenido como escenario la cárcel. Hasta allí ha ido el secretario judicial para someter a las acusadas a la prueba caligráfica. Quiere cotejar si su letra es la misma que la de los planes de seguimiento que la policía encontró en casa de Triana. Una prueba que también ha hecho a la agente Raquel Gago. Pero esta no es la única diligencia que se plantean. Cabe la posibilidad de un careo entre las 3 acusadas, algo que, según el abogado de la agente , no dependen de él. Raquel está pendiente de su traslado a otra cárcel, mientras madre e hija parecen amoldarse cada vez más a la vida entre rejas.