Pantoja, Pedro Duque y Raphael, así vivieron ellos la llegada del hombre a la Luna

  • Este fin de semana se cumplen 50 años de la llegada del hombre a la luna

  • "Vivir momentos tan cruciales es algo emocionante", aseguran

“Estábamos todos pegados a la televisión”, este fin de semana se cumplen 50 años de la llegada del hombre a la Luna. Una proeza que millones de personas, aquí y en todo el planeta, miraban absortos a la pequeña pantalla para ver en directo la mayor hazaña del ser humano: la conquista a la Luna. Una conquista que no paso desapercibida para el Ministro en funciones Pedro Duque, la cantante Isabel Pantoja o Raphael.

Una aventura épica que se hizo realidad aquel mes de julio de 1969. A bordo Amstrong y Aldrin, mientras Collins esperaba dando vueltas alrededor del satélite. Después llegó el momento soñado: el lunes 21 el hombre dejaría su huella en la superficie lunar, un momento que todo el mundo lo recuerda.

El Ministro en funciones de Ciencia, Innovación y universidades, Pedro Duque, recuerda ese momento de forma muy especial y asegura que “todos los niños querían ser astronautas ese día”. Todos pendientes de una televisión “en blanco y negro” y con la emoción de vivir un hecho histórico acompañado de sus familiares.

Este “pequeño paso para el hombre y gran salto para la humanidad” sorprendió hasta a la cantante Isabel Pantoja, que con 12 años se sorprendía de dicha hazaña: “pensaba cómo pueden estar ahí arriba”.

El hombre en la Luna, una proeza que no se ha librado de cierta controversia ya que algunos pensaban que todo había sido parte de un “engaño”. Aunque a día de hoy hay quien duda de la veracidad de este hecho. “Pero cómo nos van a estar engañando si he visto el cohete salir para arriba”, asegura Pantoja.

Todo el mundo lo vio, si no le pilló como a Raphael que estaba trabajando. “Estaba cantando en Las Vegas y no pude verlos por televisión ni nada”, afirma el cantante que, sin embargo, recuerda cuando vinieron a España, tres meses después: “Yo estaba por donde pasaron ellos en la Gran Vía en el Palacio de la Música”. Y es que “vivir momentos tan cruciales es algo emocionante” aunque seas el mismísimo Raphael.