La Maláguide, un infierno geológico donde reina la cuarcita, atrapa a Julen

telecinco.es 25/01/2019 21:27

La cuarcita es una de las rocas más duras de la escala de Mohs, una relación de diez minerales ordenados por su dureza, de menor a mayor. Se basa en el principio de que una sustancia cualquiera puede rayar a otras más blandas, sin que suceda lo contrario. Pues bien, la cuarcita está en el puesto número siete, solo por detrás del topacio, el corindón y el diamante. Esa es su dureza, pero en el caso del pozo de Julen se da la circunstancia de que está mezclada con otros materiales.

"Hablamos de un lugar que muestra una geología muy irregular con zonas blandas y duras", señala el experto. En este caso, hay que añadir que debido a las condiciones "estamos ante un cuarzo cementado, lo que hace más difícil poder romperlo. Porque el cuarzo no deja de ser arena suelta de playa, al cual la temperatura y la profundidad lo ha convertido en lo que es ahora. En el caso del pozo, la mezcla con otros materiales como pizarra hace todo más complejo".

El cuarzo no presenta, pese a todo, según José Ignacio Escavy, más riesgo de provocar otro derrumbamiento que otras rocas, y menos con la preparación de unos mineros que han entibado el pozo a su paso. La voladura, también extremadamente controlada. Sorprende eso sí, en opinión del experto, que se estén encontrando en el rescate con tantas sorpresas, porque lo normal es hacer un estudio previo del terreno que se puede hacer en paralelo. Y no tiene que llevar muchos días porque Málaga y Granada cuentan con expertos en este terreno. "La sensación es que van a ciegas, pero tampoco tenemos datos de lo que está sucediendo y las circunstancias son complejas".

El experto pone como ejemplo que cuando se lanza un cohete los meteorólogos analizan todo para aconsejar el día, la hora y la trayectoria que debería tener el cohete para evitar imprevistos. Al menos, esos datos se manejan. "Aquí, con los expertos de Málaga y Granada se podría haber hecho un trabajo paralelo que precediera al de la perforadora".

No es una crítica la de Escavy, que tiene claro que "nadie sabe todo lo que se produce en esas circunstancias tan complicadas, porque lo que vemos es la punta del iceberg, en el terreno hay rocas plegadas, que cambian de orientación, todo muy complejo". Como dicen los expertos, la montaña manda y esta es una de las más duras, un infierno total, ella es la que marca el ritmo y ahora ha mandado parar.