Una menor de dos años muere tras caer en la fosa de cocodrilos que su familia cuidaba

  • La madre cuidaba de su otro hijo recién nacido, y fue el padre quien descubrió los hechos al llegar al domicilio

Rom Roath Neary, una niña de dos años de edad, ha fallecido después ser devorada por cocodrilos que su propia familia cuidaba en el área de Siem Reap en Camboya. Al parecer, los padres se despistaron en un momento y la menor aprovechó para avanzar a la parte trasera del recinto sin percatarse del precipicio que acechaba el lugar, según ha indicado Daily Mail.

El padre de la menor encontró el cráneo de la fallecida

La reciente natalidad que la madre de la menor había vivido hace escasos días impidió, según el teniente de la policía Och Sophen, que la misma se percatase de que su otra hija había escapado hacia la parte posterior de la casa. El padre, que se encontraba fuera del domicilio, fue la persona que se percató de lo sucedido e identificó el cráneo de la fallecida en la fosa.

Las autoridades policiales apuntaron que la familia había construido una cerca alrededor de los animales porque aún eran "pequeños" como para poder acceder al exterior.

La noticia que ha conmocionado no sólo a la sociedad camboyana sino al mundo entero al conocer la tragedia, también ha señalado la importancia de vigilar la presencia de otros animales de estas características cuando habiten en propiedades dedicadas, por ejemplo, a la producción de cuero y carne.