Rubén y su madre han devuelto algo de humanidad a los fríos salones del antiguo Senado. Frente a la princesa Letizia, esta madre y su hijo han relatado su dura experiencia vital como víctimas de las denominadas 'enfermedades raras'. Su historia de lucha y supervivencia ha logrado emocionar profundamente doña Letizia. Estaban allí para ponerle voz a todos aquellos que padecen estas extrañas dolencias a las que los laboratorios y la ciencia suelen dejar de lado. En su emotivo discurso han pedido que no se les olvide en estos tiempos de crisis, pero sobre todo nos han dado una maravillosa lección de amor y coraje.