Del frontal a la mandíbula: ¿sabes qué huesos forman la cabeza?

  • Nuestra cabeza ósea está formada por un total de 22 huesos: conoce los más importantes

  • De todos ellos, la mandíbula es el único que tiene movilidad: gracias a él podemos comer y hablar

  • La principal función de este conjunto de huesos es proteger el encéfalo y los órganos de los sentidos

Nuestro cráneo cumple una función básica: proteger el encéfalo para evitar cualquier tipo de daño que pueda afectar gravemente a nuestra salud. De ahí su dureza y lo robusto de esta estructura ósea, pensada para ser resistente a impactos importantes. Su forma férrea nos invita a pensar que el cráneo es una unidad formada por un único hueso pero, en realidad, se trata de un 'puzzle' que, de forma conjunta, nos proporciona la protección que necesitamos. Parte de este puzzle lo componen también los huesos de la cara, incluyendo a la mandíbula. ¿Qué huesos forman la cabeza ósea?

Qué huesos forman la cabeza

Cuando hablamos de cabeza ósea, esqueleto de la cabeza o calavera nos referimos al conjunto de huesos que forman el esqueleto de la cabeza, incluyendo tanto al cráneo como a los huesos de la cara. Todos ellos rodean y protegen al encéfalo y los órganos de los sentidos. Además, en este conjunto de hueso se encuentra el aparato de la masticación. En total, existen 22 huesos en el esqueleto de la cabeza, de los que tan solo la mandíbula tiene movilidad. Estos son los principales:

  • Frontal. Este hueso se sitúa, tal y como indica su nombre, en el área que conocemos como la frente. Es uno de los huesos más grandes de la cabeza y parte de la zona superior de la cuencas oculares hasta la zona en que comienza normalmente el cabello.
  • Parietal. Justo detrás del frontal encontramos este hueso que se encuentra en la parte superior de la cabeza y que es el más grande de este área. Llega casi hasta el final de la zona posterior del cráneo y podemos situarlo detrás del frontal, delante del occipital y por encima de los huesos temporales.
  • Occipital. Este hueso se encuentra en la parte trasera inferior de la cabeza y une el cráneo con la columna vertebral.
  • Temporal. Los dos huesos temporales, uno a cada lado, se unen con parietal y occipital, y podemos situarlos en el área del oído.
  • Esfenoides. El hueso esfenoides es un hueso impar que se sitúa en la parte media de la base del cráneo, formando parte de la estructura interna profunda de la cara, de las fosas nasales y del propio cráneo. En él se aloja la glándula hipófisis.
  • Cigomático. Como continuación del esfenoides, este hueso es par, corto y compacto, y lo encontramos en la parte extrema de la cara, formando el pómulo de la cara y parte de la órbita del ojo.
  • Nasal. Se trata del hueso de la nariz, uniendo al hueso frontal con el maxiliar.
  • Lagrimal. Lo encontramos en la parte interna de las cuencas de los ojos, alojando a las glándulas lacrimales.
  • Maxilar. Estas dos dos piezas óseas que forman la boca y en ellas están encajados los dientes.
  • Mandíbula. La mandíbula se une a ambos lados con el hueso temporal y tiene movilidad, permitiéndonos comer, beber y hablar.

Además de estos huesos existe otros de pequeño tamaño pero importante función. Es el caso de los dientes, cada uno con su propia función, básicos para la alimentación. Lo mismo se aplica a los huesos del oído (martillo, yunque y estribo), que determinan nuestra capacidad auditiva.